Santo Domingo.- El procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, puso a disposición de los países iberoamericanos el plan con las buenas prácticas del Modelo de Gestión Penitenciaria que impulsan en el país, el cual ha sido reconocido internacionalmente por sus efectivos programas de reeducación y reinserción social.
En ese sentido, manifestó que están en la disposición de contribuir y ofrecer las facilidades y conocimientos que sean necesarios para que todos los programas especiales de rehabilitación que aplican en los centros de corrección del Modelo Penitenciario dominicano puedan ser implementados en los sistemas de otras naciones que así lo requieran.
“Con el establecimiento del nuevo modelo penitenciario, la República Dominicana siente un gran orgullo porque estamos transitando un camino muy positivo en ese sentido. Nos llena de satisfacción ver a los agentes de vigilancia e internos compartiendo la misma aula, estudiando carreras universitarias de psicología y derecho, además de ver alrededor de 30 mujeres estudiantes de psicología en el Centro de Corrección Najayo-Mujeres, en San Critóbal”, resaltó Domínguez Brito.
No obstante, dijo que el país aún atraviesa por grandes vergüenzas, ya que el tema penitenciario es uno de los más complejos, y que enfrenta la gran paradoja de dejar a un lado al ser humano para dedicarse más a las formas y apariencias.
El Modelo Penitenciario dominicano cuenta actualmente con una población aproximada de 9 mil 500 privados de libertad. Se trata de un sistema que refleja tasa cero de analfabetismo y que registra una reincidencia por debajo del 5%, que representa la más baja de todos los países de la región.
Por sus buenas prácticas ha sido reconocido internacionalmente por diversos organismos internacionales, entre ellos, por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Organización de los Estados Americanos (OEA).
El plan incluye la construcción y remodelación de plantas físicas, y la implementación de programas de alfabetización y educativos en los niveles básico, medio y universitario, terapias ocupacionales por medio de proyectos de producción agrícola e industrial, así como la integración de los internos a actividades deportivas y recreativas.
Su implementación conlleva además la preparación de un personal especializado para el tratamiento de los privados de libertad, integrado por médicos, psicólogos, trabajadores sociales, así como por agentes penitenciarios debidamente entrenados en la Escuela Nacional Penitenciaria (ENAP).
Funciona en los centros de Vista al Valle, en San Francisco de Macorís; San Felipe, de Puerto Plata; Rafey-Mujeres y Rafey-Hombres, en Santiago; Najayo-Mujeres, Najayo-Hombres y Femenino de Sabana Toro, en San Cristóbal, y el en Centro de Corrección Abierto de Haras Nacionales y el de Adultos Mayores que funciona en este sector de Santo Domingo.
También, operan bajo el nuevo esquema el de la Isleta, en Moca; Anamuya, en Higüey; El Pinito, en La Vega; Cucama, en La Romana, y el Femenino de Baní, así como los CCRs de Elías Piña, Dajabón, Mao, Monte Plata y San Pedro de Macorís.
El procurador Domínguez Brito ofreció la colaboración a los ministros de justicia de Iberoamérica que se encuentran de visita oficial en el país participando en la XIX Asamblea Plenaria de la Conferencia de Ministros de Justicia de los Países Iberoamericanos (COMJIB), que es un organismo internacional conformado por 21 países miembros, 19 de Latinoamérica y El Caribe, junto a Portugal y España.