Tokio, 8 jun (PL) Pescadores japoneses capturaron más de 700 delfines durante los últimos cinco años a pesar de los duras críticas internacionales contra esta práctica, revelaron hoy diarios locales.
La mayor parte se destinó al consumo local -cerca de 360- mientras que el resto terminó en acuarios fundamentalmente de Asia y Europa.
Críticas internacionales recientemente llevaron a la asociación japonesa de acuarios y zoológicos a prohibir a sus miembros que compren delfines de Taiji, principal localidad donde ocurren estas actividades.
La asociación nipona arreció sus críticas contra los pescadores y comerciantes luego de que el organismo rector a nivel mundial (WAZA, por sus siglas en inglés) amenazara con expulsar a Japón.
La mayor parte de los miembros de WAZA son europeos y estadounidenses y apenas cuenta con representantes de Asia y Oceanía.
Las ventas de delfines de Taiji podrían verse reducidas considerablemente si los parques en Japón deciden seguir adelante con la prohibición de comprar estos ejemplares.
Un ejemplar vivo de estos cetáceos puede superar los 10 mil euros en el mercado internacional, mientras que los destinados al consumo se venden a razón de 500 euros.
Japón destaca también por ser el principal proveedor de ballenas para el mercado mundial, actividad muy lucrativa pero que ha puesto al borde de la extinción a esos mamíferos oceánicos