Además, mediante órdenes de arrestos, fueron detenidas dos personas, contra las cuales en las próximas horas será solicitada medidas de coerción, consistente en prisión preventiva, y son perseguidos varios prófugos.
Azua.- En un operativo de las autoridades del Ministerio Público adscritas a la Procuraduría Especializada de la Salud conjuntamente con un amplio contingente de la Policía Nacional procedente de Santo Domingo, fue desmantelado un laboratorio clandestino de fabricación de bebidas alcohólicas que operaba en el Distrito Municipal Las Lomas de esta provincia, y se procedió al decomiso de materias primas valoradas en cientos de miles de pesos.
Dicho laboratorio contaba con más de mil tanques de 55 galones y varios en proceso de fermentación, con tuberías de conducción para el llenado de galones, donde se fabricaban bebidas de las denominadas triculí o petrinche, muchas de las cuales eran envasadas en botellas de ron de marcas nacionales.
Se informó que tras obtener órdenes arrestos y allanamientos, emitidas por la Oficina del Juzgado de Atención Permanente de Azua, fueron apresados los nombrados Felipe Matos Féliz (Chago) y Nancy Matos, contra los cuales en las próximas horas se pedirá medidas de coerción, consistente en prisión preventiva.
Además son perseguidos los prófugos conocidos como Bernardo, Manolo, Chon, Chonga y La Gringa, luego que contra éstos también fueran emitidas órdenes de arrestos y allanamientos.
El magistrado Rafael Brito Peña, titular de la Procuraduría Especializada de la Salud, dijo que se trataba de un gran laboratorio y que la operación para desmantelarlo se llevó a cabo tras una ardua labor de inteligencia de varios meses entre el Ministerio Público y la Policía Nacional.
Dijo que profundizan las investigaciones y que a través de la Procuraduría Fiscal de Azua procederán a someter a la justicia a los implicados.
En las labores también participaron, el procurador fiscal titular de Azua, Eusebio Corcino, y los fiscales de esa jurisdicción, Tomás Zayas y Edgar Ciccone, junto a los fiscales de la Procuraduría Especializada de la Salud, magistrados Joselito Cuevas Rivera y Ruddy Pérez Medrano.
Además fueron integrados policías de inteligencia de los equipos swat y contramotines de la Policía, así como miembros de la Policía de Azua, como medida preventiva por la magnitud de la operación.