La lista negra europea incluyó a Antigua y Barbuda, Anguila, Islas Turcas y Caicos, Islas Vírgenes de Estados Unidos, Belice, Bermudas, Islas Vírgenes Británicas, Granada, Montserrat, San Vicente y las Granadinas, Bahamas, San Cristóbal y Nieves, Islas Caimán y Barbados.
A la insinuación que abarca a 30 países de la Unión Europea, la Comunidad del Caribe (Caricom) la rechazó.
"Esa aseveración es evidentemente falsa puesto que los estados miembros (de la Comunidad) se esfuerzan siempre para cumplir con las medidas onerosas y unilaterales de la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo, que implanta los estándares internacionales sobre la cuestión impositiva", aseveró el bloque.
El mecanismo caribeño manifestó sorpresa porque durante una reciente reunión en Bruselas entre sus socios y la UE, nunca se tocó el tema de la lista negra y los europeos abogaron por fortalecer la colaboración y las relaciones mutuas.
"Caricom expresa su profunda decepción e inquietud por la conducta de la UE en este tema", finalizó un comunicado oficial, el cual enfatizó en la importancia de los servicios financieros para las economías de la zona.
La mayoría de esas naciones caribeñas también rechazaron de manera individual esa acción, la calificaron de desacertada, arbitraria e injusta, y planean presentar sus respectivas quejas ante el bloque del llamado viejo continente.