Camina RD, movimiento político por una vida digna, acusó hoy al Gobierno, a la clase política tradicional y al sector patronal de República Dominicana de utilizar el tema migratorio para hacer ver a los trabajadores y trabajadoras haitianos como los responsables de las grandes calamidades que padece el pueblo dominicano por culpa del modelo económico, la corrupción, la impunidad y las políticas públicas que favorecen el enriquecimiento constante de una pequeña minoría a costa de la miseria de las grandes mayorías nacionales.
“Es hora de que nuestro pueblo sepa que quienes son realmente enemigos de nuestro pueblo son los corruptos y los que permiten que roben con impunidad el dinero público. Que el verdadero enemigo de nuestro pueblo es este sistema que los mantiene en la pobreza”, expresó la organización durante una rueda de prensa celebrada en las instalaciones del Centro de Planificación y Acción Ecuménica (CEPAE).
Camina RD entiende que las élites políticas y económicas abordan con hipocresía el tema migratorio, porque obvian en sus intervenciones públicas que la contribución decisiva de la comunidad de trabajadores de origen haitiano y dominicano ha sido fundamental para levantar a la República Dominicana en sus estructuras económicas. “Al igual que lo hacen nuestros compatriotas en Estados Unidos o en Europa, donde residen cerca de una quinta parte de la población dominicana, es el esfuerzo a base de sudor, lágrimas y sangre, que los pueblos humildes y pobres como los nuestros, pueden sobrevivir”, sostiene, y agrega:
“Acusamos a la clase empresarial dominicana de mantener una hipocresía permanente en torno a la realidad de los trabajadores inmigrantes, pagándoles, al igual que a los trabajadores dominicanos, salarios míseros. Acusamos a la clase política nacional de entrar en contubernio con los sectores económicos poderosos del país, y servirles de brazo ejecutor de una política anti-inmigrante de corte racista, xenófoba contra los inmigrantes que son pobres”.
El movimiento político cree que el grueso de la intelectualidad dominicana y las fuerzas progresistas y liberales han callado o no han hecho lo suficiente para hacer avanzar las ideas de confraternidad, tolerancia y respeto hacia las poblaciones de ascendencia haitiana, la cual, a su juicio, ha sido blanco de las peores y más reaccionarias corrientes políticas de nuestro siglo.
“Es hora para que los sectores liberales, progresistas y de izquierdas de nuestro país hagan frente común contra el régimen imperante de represión, atropello e inequidad para los pobres (no importa su nacionalidad) en República Dominicana”, concluye Camina RD en un texto en el que, luego de reconocer el derecho de todo Estado de poner orden en su política migratoria, también denuncia la existencia de graves casos de manipulación mediática en el tema migratorio.