Las ventas de facturas a través de esa ventanilla, constituye el primer bróker de factoring agropecuario en el país que dará alivio a los productores y dinamizará la comercialización y la producción.
PEDRO BRAND.- Dando cumplimiento a iniciativas innovadoras anunciadas por el presidente Danilo Medina en encuentros con productores agropecuarios, MERCADOM abrió hoy una ventanilla para la compra y venta de facturas a comercializadores y productores.
El proceso será posible mediante un acuerdo firmado entre MERCADOM y la empresa Mercado de Facturas (Mercofact).
La ventanilla Factoring MERCADOM está ubicada en el edificio administrativo de Merca Santo Domingo, lo que permitirá que los productores reciban el importe de sus ventas para que puedan capitalizarse sin tener que endeudarse.
Las explicaciones en ese sentido fueron ofrecidas por el agrónomo Claudio Jiménez, administrador de MERCADOM y Miguel Ángel Adames, gerente general de Mercofact, durante un acto al que asistió el ministro de Agricultura, Ángel Estévez y productores agrícolas del país.
Las ventas de facturas a través de esa ventanilla, constituye el primer bróker de factoring agropecuario en el país que dará alivio a los productores y dinamizará la comercialización y la producción.
La ventanilla Factoring de Mercadom está disponible para los relacionados, comercializadores en general, socios y arrendatarios del Merca Santo Domingo, que les permitirá a los productores vender sus cuentas por cobrar y recibir su pago más rápido a través del Banco de Reservas.
“Porque el empresario no tendrá que esperar 90 días para recibir su dinero, sino que el banco le depositará en su cuenta el valor de sus facturas”, dijo Jiménez.
En su intervención, el ministro de Agricultura, calificó esa nueva forma de vender los productos como “un paso de avance memorable e innovador en la comercialización que beneficia la agropecuaria nacional”.
Esa iniciativa será llevada a todos los mercados del país para evitar que los costos de los productos se eleven demasiado y los productores pierdan sus ganancias por el prolongado tiempo que tienen que esperar para que les paguen.