La masacre de al menos ocho personas, entre ellas cinco niños, ocurrió en una casa de Houston, luego que la Policía intercambiara disparos con un hombre al que se considera sospechoso de cometer el hecho.
Medios locales reportan que a la casa había acudido un grupo de comisionados, ubicado en la cuadra 2200 en Falling Oaks Road, alrededor de las nueve de la noche del sábado, a los fines de realizar una comprobación de bienestar.
El portavoz del sheriff del condado de Harris, Thomas Gilliland, dijo que posteriormente, los enviados recibieron la información de que un hombre dentro de esa casa era buscado por una orden de asalto agravado en perjuicio de un miembro de la familia.
La cadena Univisión da cuenta que los comisionados vieron el cuerpo de un menor a través de una ventana, por lo que entraron a la casa.
Cuatro de ellos irrumpieron en el hogar, lo que provocó que el hombre de 49 años empezara a disparar. Los comisionados se retiraron y esperaron la llegada de la unidad de operaciones. El hombre se retiró alrededor de una hora después.
“En este momento tenemos lo que parece ser cinco niños y tres adultos”, dijo Gilliland. “Desconocemos la edad y género de las víctimas, así como la causa de muerte, que deberá ser determinada por el médico forense”.