Participó en el denominando “Pilotos” Complot de los de la Fuerza Aérea de la República Dominicana (FARD) , el 19 de noviembre de 1961, movimiento militar que tuvo como misión la salida definitiva de la familia Trujillo de la República Dominicana.
Santo Domingo, República Dominicana, 16 de Agosto del 2015: Con mucho pesar, los familiares informan que ayer, falleció en esta ciudad el General de Brigada Piloto (r) de la Fuerza Aérea de la República Dominicana (FARD), José Nelton González Pomares. Nacido en Sabana de la Mar, el 28 de marzo de 1928, ingresó a la institución el 1ro de septiembre de 1947, como Raso Estudiante, a la corta edad de 19 años.
Durante su carrera de aviación, el General de Brigada Piloto (r) José Nelton González Pomares recibió numerosos ascensos y condecoraciones; entre ellos: Orden de Mérito Aéreo con distintivos blanco y azul; Medallas de Constanza, Maimón y Estero Hondo; Orden del Mérito Militar con distintivo blanco; Orden del Mérito Policial con distintivos blanco, verde y azul en Primera Clase; Orden del Mérito Naval con medalla de mérito Naval. Además, fue Sub-Jefe de Estado Mayor Técnico, Comandante de los Grupos de Caza y Bombarderos y Comandante del Grupo de Caza Ramfis.
Destaca su participación en el denominando “Complot de los Pilotos” de la Fuerza Aérea de la República Dominicana (FARD , el 19 de noviembre de 1961, movimiento militar que tuvo como misión la salida definitiva de la familia Trujillo de la República Dominicana y la restauración de un verdadero proceso de garantías democráticas en el país.
Finalizada dicha gesta militar, fue nombrado Agregado Militar en la ciudad de Washington, Estados Unidos. Durante el gobierno de Antonio Guzman, fue designado Director General de Aeronáutica Civil (DGAC), Administrador de la Corporación Dominicana de Empresas Estatales (CORDE) y Director General de la línea bandera nacional, Dominicana de Aviación (CDA).
El General de Brigada Piloto (r) José Nelton González Pomares, tuvo una incuestionable aceptación entre sus compañeros, donde era altamente respetado como militar y por su extraordinaria calidad humana e intachable integridad. Fue un hombre de elevados principios y un ejemplo de seriedad y honestidad.
Con su partida, la República Dominicana pierde un hijo sobresaliente; un referente militar de la historia dominicana; un hombre de gran coraje y valentía; y sobre todo, un ser humano digno y desinteresado.
Su legado y trayectoria de vida nos sirve de inspiración a todos. Su nombre será recordado para siempre con la admiración, el amor y el respeto que él se merece.