Un inmigrante apareció muerto y su cadáver fue cubierto con árboles.
SANTIAGO.- Desconocidos incendiaron la madrugada de hoy una vivienda, donde residían jornaleros extranjeros en Hatillo Palma, de Villa Vásquez, como aparente respuesta a la violación de una dominicana por parte de tres haitianos, informó la mañana de este jueves la Policía.
La casa destruida era propiedad del dominicano Freddy Acosta, que está ubicada en la calle Principal de Hatillo Palma y éste se dedica al alquiler del inmueble a familias haitianas.
Este hecho se suma al hallazgo del cadáver del haitiano Wislin Ydac, de 25 años, que fue lanzando en el paraje Los Cerros, donde residía. El cuerpo del extranjero presenta herida de arma blanca en el cuello, de acuerdo al diagnostico de la médico legista Rosibel Grullón.
Ante la tensa calma que se vive desde ayer, en Hatillo Palma, las autoridades decidieron apostar miembros del Ejercito de la República y agentes de la Policía Nacional, en las viviendas y negocios donde aun permanecen haitianos, para evitar que sean sacados a la fuerza y destruidas sus pertenecías.
Ayer, una turba de dominicanos sacaba y destruía ajuares de haitianos que residen en Hatillo Palma, luego que se conocieran los detalles de que Carolina Altagracia Cruz Peguero, de 45 años, fue violada en su residencia del sector El Cayito por tres extranjeros.
También advertían a los propietarios de las viviendas que acogían a los migrantes, en el sentido de que las incendiarían, amenaza que comenzaron a hacer realidad anoche.
La tarde de ayer, la fiscal de Montecristi, Johanna Bejarán, en compañía de los coroneles Eddy Francisco Pérez, de la Policía y Wanel Rivas Belliard, del Ejercito de la República, así como varios empresarios bananeros de la zona, se reunieron con la comunidad para buscar una solución al conflicto, que provocó la salida masiva de haitianos que residían en Hatillo Palma, por temor a represalias.
Durante el encuentro, celebrado en los salones del grupo Banamiel, se acordó con representantes de la comunidad que continuaran residiendo allí los extranjeros identificados como obreros en fincas, crear una comisión de siete personas para evitar la entrada de otros haitianos y ubicar los que violaron a Cruz Peguero.
“No podemos exigir un derecho, no podemos exigir justicia y ejecutar un crimen sobre otros crímenes”, advirtió durante el encuentro la fiscal titular de Montecristi.
Sin embargo, ese encuentro no evitó que familiares de la mujer violada realizaran anoche una marcha pacífica por las calles del pueblo, portando pancartas donde pedían justicia y que fueran sacados los haitianos de la comunidad.
Francisca Altagracia Peguero, madre de la mujer ultrajada, dijo que su hija narró que mientras los haitianos cometían el hecho, tenían en su cuello un colín y, además, le robaron dinero en efectivo y varias pertenencias.
“Nosotros somos huérfanos porque no tenemos autoridades, porque el pueblo es que está actuando y ellos no dicen nada. Que se vayan para su país, porque cuando a un dominicano ilegal lo mandan para acá, nadie dice nada”, apuntó Peguero.
La madrugada de hoy fueron apresados el regidor Alejandro Ortega y José Emilio Ortega, este último primo de la víctima, quienes no estaban de acuerdo que se buscara una solución pacifica al conflicto.
Mientras, que la Policía informó este jueves que la presencia policial en la dotación de esa institución en Hatillo Palma fue reforzada con el objetivo de evitar cualquier confrontación entre dominicanos y haitianos.