Resulta insólito, para cualquier persona, medianamente enterada del mundo, que una Ley sea atacada tanto, objetada tanto, cuestionada tanto, y hasta suspendida su aplicación POR UN AÑO, por una de las cámaras que la aprobó.
Resulta, que extrañamente, todos los sectores nacionales se oponen a la Ley No. 140-15 que regula el notariado dominicano y crea el Colegio Dominicano de Notarios, recientemente promulgada por el Poder Ejecutivo, alegadamente por ser contraria a los principios del ordenamiento jurídico dominicano.
Ahora la Ley que crea el Colegio Dominicano de Notarios, es la perversión más grande del mundo. Ahora resulta que NADIE conocía el susodicho proyecto ley, o sea, que bajó del cielo, por obra y gracia de algún ser extraño que no es de este mundo.
Pero carajo, no se supone que todo proyecto de ley, es conocido primero en COMISION? No se supone que todo proyecto de ley, debe ser leído, estudiado y discutido por nuestros congresistas, de ambas cámaras?
Como es posible, que tantos diputados, que tantos senadores, no conocieran el susodicho proyecto de Ley del Notariado.
Para que se les pagan jugosos salarios, viáticos, choferes, exoneraciones, y cuantos privilegios pudieran existir a nuestros congresistas?
O acaso, no les basta con lo que ganan, para poder dedicarle unos minutos de su tiempo a leer y estudiar un proyecto de ley?
Caramba, es por ello, que el hijo de un amigo, en una amena conversación ´´entre adultos´´, le pregunto a su padre ¿Papá, y es que los diputados y senadores NO LEEN?, esto, luego de escuchar algunas de las opiniones vertidas por personalidades del mundo económico, social, y hasta de algunos congresistas.
El niño, de apenas 8 años, insistía con su padre, que porque si una ley había sido aprobada hace apenas unos días, ahora.
¿TODO EL MUNDO SE OPONE?
Mi amigo, no encontró palabras para explicar semejante situación. Mirándolo a los ojos, solo atinó a decirle, ´´esas son algunas de las cosas que suceden en mi país, y que a su tiempo tu entenderás´´.
Al observar las explicaciones que ofrecía mi amigo a su hijo, en una forma de paréntesis, en la conversación que sosteníamos, solo me vino a la cabeza, uno de los artículos que escribí en meses anteriores, intitulado, PARA QUE SIRVE UN REPRESENTANTE?
Pero volviendo al tema central del presente artículo, donde me cuestiono y cuestiono por qué ahora tanta gente se opone a una ley que según nuestro ordenamiento jurídico, debe ser aprobada, primero en una de las cámaras, luego en la otra, y………luego….ser enviada al Poder Ejecutivo, donde se supone es examinada por la ConsultoríaJurídica del Presidente de la Republica, para recomendar su aprobación u observación.
De todos los estamentos de poder involucrados en el sometimiento, conocimiento, y aprobación de una ley, solo el Poder Ejecutivo podría estar exento de responsabilidad, ya que se supone que este solo debe firmar lo que se le presenta, para su promulgación u observación.
Pero, me pregunto además. ¿Y qué paso con el cedazo de la Consultoría Jurídica del Poder Ejecutivo? No se supone que esta oficina debe conocer, leer y evaluar las leyes enviadas por el Congreso Nacional, para la promulgación del Poder Ejecutivo?
Por cuantas manos pasa un proyecto de ley, para llegar a su aprobación y promulgación final?
Que fallo con la Ley No.140-15 que regula el notariado e instituye el Colegio Dominicano de Notarios?
Para los que esperaban algún análisis u opinión, acerca de las tarifas y costos de honorarios que instituye la nueva Ley, (ahora pospuestas por el Senado de la República), no me referiré a ese tema.
Ahora resulta que la Ley será dejada sin efecto cuando entre en vigencia otra que la sustituye, para, alegadamente, ´´consensuar con todos los sectores involucrados´´.
Eso significa que en el conocimiento y aprobación de la ley 140-15 no se buscó el consenso con nadie, o sea, se impuso a rajatablas esa ley? Digo yo, no.
Creo, que independientemente de que se consideren altos los costos impuestos por la nueva ley, ante los servicios requeridos por los ciudadanos, ante un Notario, mi análisis no se centra en esto.
Mi pregunta es y seguirá siendo, por qué ahora los congresistas que aprobaron en ambas cámaras la ley de notariado, se desdicen, y hasta el Poder Ejecutivo calla, luego de promulgarla.