"Un ataque contra Turquía significa un ataque contra la OTAN", advirtió Tayyip Erdogan en una conferencia de prensa en Bruselas, en referencia a las persisistentes violaciones del espacio aéreo por aviones rusos.
Las violaciones se han producido luego que Rusia extendiera sus ataques aéreos para incluir la histórica ciudad siria de Palmira.
Ante la situación, el presidente turco, Tayyip Erdogan, afirmó que estaba perdiendo la paciencia con las violaciones rusas al espacio aéreo de su país, tras el más reciente incidente ocurrido el fin de semana.
Mientras que el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo que la alianza tenía reportes de una importante concentración militar rusa en Siria, que incluía tropas terrestres y barcos en el este del Mediterráneo.
"No especularé sobre los motivos (…) pero esto no parece un accidente y hemos visto dos de ellos", dijo Stoltenberg sobre las incursiones aéreas sobre la frontera de Turquía con Siria. Señaló que "duraron un rato largo".
La OTAN ha descrito como "extremadamente peligrosos" e "inaceptables" los incidentes y agregó que dejan de manifiesto los riesgos de una escalada en la guerra civil siria.
Aseguró que aviones rusos y estadounidenses realizan misiones de combate sobre el mismo país por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial.
El Ministerio de Defensa de Rusia había admitido que sus aviones SU-30 ingresaron en el espacio aéreo turco en la frontera con Siria "por unos segundos" el sábado, un error causado por el mal tiempo. La OTAN dice que también ocurrió el domingo, un hecho que Moscú afirmó que investigaba.