Presidente Juan Bosch: "Ordenó a las Fuerzas Armadas marchar a la frontera dominico-haitiana en actitud de guerra, las Fuerzas Armadas no obedecieron a su comandante en jefe".
El Profesor Juan Bosch asume la presidencia de la República el 27 de febrero del año 1963, producto de haber ganado las primeras elecciones democráticas después de la muerte de Trujillo.
El presidente de Haití Jean Claude Duvalier, mostró sus desafectos por el presidente Juan Bosch, que según el mismo lo revela en el libro capítulo XVII del libro: "Crisis de la Democracia de America en la República Dominicana":
"Ignoro debido a qué, tan pronto resulté electo Presidente, Duvalier resolvió matarme. Tal vez soñó conmigo e interpretó el sueño como una orden de quitarme la vida; quizá en un acceso de hechicería vudú uno de sus espíritus protectores le dijo que yo sería su enemigo. Es el caso que escogió un antiguo agente del espionaje de Trujillo, que había sido Cónsul de Haití en Camagüey —Cuba— y le encargó mi muerte. Durante toda la campaña política, yo no me había referido ni una sola vez a Duvalier…"
Esta actitud de Duvalier, no guarda relación con asunto de religiosidad, ni hechicería, era un asunto de política internacional dirigida por el Pentágono norteamericano, pues se empezaba a endurecer la línea política estadounidense contra la Unión Soviética, y en Cuba había surgido el primer gobierno de naturaleza socialista, y Estados Unidos tenía la sospecha que Juan Bosch era de tendencia comunista "pro soviético", amigo personal de Fidel Castro y casado con una dama ciudadana cubana.
Los primeros años de la década del 60 se caracterizaron por significar una nueva etapa para la humanidad en lo científico, cultural, espacial (Yuri Gagarin efectúa varias órbitas a la Tierra a bordo de un satélite soviético). En el año 1961 se construye el Muro de Berlín, esto significa una división entre las sociedades capitalistas y comunistas. Este mismo año Estados Unidos auspicia la invasión fallida de Bahía Cochino en Cuba. Muere en un accidente aéreo Dag Hammarskjöld secretario general de la ONU, que había condenado el apartheid.
En el año 1962 llegaron los asesores norteamericanos a Vietnam, esta fue una guerra que polarizó la juventud del mundo. Mientras que en el Caribe se desarrolla la dramática crisis de los misiles cubanos, produciendo un enfrentamiento de John F. Kennedy con la Unión Soviética.
En este escenario mundial gana el PRD las elecciones presidenciales el 20 de diciembre del año 1962, y como era de esperarse un dictador retrógrada como Duvalier no establecería unas relaciones diplomáticas armoniosas con un demócrata y sobre todo con la sospecha de que era comunista, quien tenía la iglesia católica en contra y los sectores de poder, los sectores económicos más importantes adversos, a quienes Bosch llamaba el término despectivo "tutumpote".
La situación del enfrentamiento entre el gobierno dominicano y haitiano, se produce porque el 26 de abril de 1963, agentes de la Policía de Haití, asaltaron la embajada dominicana en Puerto Principe. Esta noticia impactó al pueblo dominicano y toda la sociedad dominicana reacciono indignidad por esta agresión a la República Dominicana.
Los acontecimientos sucedieron como consecuencia de que el general Francois Benoit, se asiló en la embajada dominicana.
Cuentan que se produjo el intento de secuestrar a los hijos de Duvalier y en el intento fallido murieron militares, incluyendo un sargento que era chofer de los hijos del dictador haitiano. Los "tontons- macoutes" iniciaron una persecución de Benoit y allanaron su casa, obvio el no estaba entonces procedieron salvajemente y asesinaron a sus padres, y a todos los que se encontraban en la casa entre ellos un visitante y tres mujeres. Los "tontons-macoutes" llegaron a la embajada dominicana en Puerto Príncipe, penetraron violentamente y rodearon la casa del embajador exigiendo la entrega de Benoit.
El presidente Juan Bosch se dirigió un discurso al país, por radio y televisión, expresó que militares haitianos incursionaron en la embajada dominicana de Haití, y esto constituye "una invasión a nuestro país y una ofensa imperdonable a nuestra dignidad". Y solicitó que la Organización de Estados Americanos (OEA) investigara esta agresión a la soberanía dominicana, también hizo participe a la comunidad internacional.
El presidente dominicano explica en el libro: "Crisis de la Democracia de America en la República Dominicana": "…después de haber hablado, un plan de acción que podía librar a haitianos y a dominicanos de los peligros que podía desatar sobre ambos países un gobernante que no estaba en sus cabales. El plan era simple y no costaría una gota de sangre: la República Dominicana movilizaría tropas y las concentraría en la frontera del sur, en el punto más cercano a la capital de Haití, y la movilización se haría en tal forma que diera la impresión indudable de que esas fuerzas iban a avanzar por Haití; una vez creado el clima adecuado, la aviación militar dominicana volaría sobre Puerto Príncipe y dejaría caer hojas sueltas en francés pidiendo al Pueblo de la capital vecina que evacuara los alrededores del Palacio Presidencial, porque los aviones dominicanos iban a bombardea en un plazo de horas. Yo estaba seguro de que, dado el estado de agitación que había en Haití y la preparación del ambiente que estábamos haciendo en Santo Domingo, Duvalier huiría sin que hubiera necesidad de disparar un tiro."
Los jefes de las Fuerzas Armadas desaprobaron la decisión del presidente y le comunicaron que los vehículos para transportar los militares no estaban en condiciones mecánicas, para esa misión militar, esto significa que no obedecían al jefe de Estado, a la vez que habían campamentos de entrenamientos de guerrilleros para invadir Haiti, sin que el presidente dominicano supiese nada, aunque si las Fuerzas Armadas si tenía la información y contaba con sus anuencias, esto era otro ingrediente perturbador de las relaciones bilaterales. Mientras en República Dominicana ya estaba en marcha el plan de golpe de Estado contra Bosch.