Las autoridades dominicanas pedirán dictarán una orden de captura internacional contra los dos pilotos franceses fugados y quienes están condenados a 20 años presos. La decisión es explicada en el texto siguiente.
Es de público conocimiento el hecho de que los señores Jean Pascal Fauret y Bruno Armand Víctor Odos, ambos condenados por narcotráfico, lograron evadir la justicia dominicana.
En este momento, es de trascendental importancia que todo el país y la comunidad internacional, conozca de primera mano la verdad, para evitar especulaciones y versiones equívocas de lo ocurrido.
Lo primero que hay que aclarar es que el gobierno dominicano ha actuado de forma totalmente responsable desde el mismo inicio de este caso, que permitió el arresto y condena de los ahora prófugos, hasta el día de hoy.
Tanto las autoridades del Ministerio de Interior, como la Dirección General de Migración y la Procuraduría General a la que represento, han actuado en todo momento con total apego a las leyes de la República.
Queremos destacar igualmente la colaboración que han mostrado las autoridades judiciales francesas, quienes en todo momento han cumplido los acuerdos firmados entre ambas naciones.
Es importante, por tanto, dar a conocer dónde se produjeron las debilidades que han dado lugar a los hechos que conocemos, y también informarles de las acciones que vamos a emprender para solucionarlo.
Recordemos que, a lo largo de todo el proceso que culminó en la condena de los acusados, el Ministerio Público no cejó en pedir medidas de prisión preventiva contra los cuatro ciudadanos franceses, así como de otros 43 ciudadanos dominicanos que resultaron vinculados a esta red que operaba desde el Aeropuerto Internacional de Punta Cana.
Durante todo este proceso, los fiscales se vieron en la necesidad de recusar cerca de cinco jueces, por entender que en su momento no respondían al mandato constitucional del debido proceso de ley, resultando algunas de estas recusaciones acogidas y otras rechazadas.
Finalmente, el Tercer Tribunal de la Instrucción reconoció que el Ministerio Público había presentado pruebas suficientes para una condena.
Sin embargo, es en esta misma decisión que el tribunal decide variar la medida de coerción privativa de libertad, favoreciendo a los imputados con una medida mucho más laxa: la presentación periódica el primer lunes de cada mes ante este organismo persecutor, así como el impedimento de salida del país, sin si quiera una garantía económica.
Esto fue lo que permitió que los condenados transitaran sin custodia por el territorio nacional facilitando su fuga.
Cuando el pasado 14 de agosto estos señores recibieron una condena de 20 años de prisión, una vez más el Ministerio Público, y así consta en la sentencia, reclamó ante el Primer Tribunal Colegiado, la restitución de la prisión preventiva, porque entendimos que al imponer una pena de la magnitud solicitada, se incrementaba el peligro de fuga. Este pedido, totalmente alineado con la norma fue, sin embargo, rechazado por los magistrados.
Hoy, podemos ver cómo la tibieza ante estas redes internacionales que utilizan nuestro territorio como puente para el narcotráfico, ha tenido graves consecuencias.
En ese sentido, el próximo paso que daremos será solicitar que sea fijada la audiencia de apelación interpuesta por los imputados.
En la misma pediremos, primero, que sea suspendida la libertad de los mismos y que sean declarados en rebeldía los señores Pascal Jean Fauret y Bruno Odos.
Una vez obtenida la rebeldía, procederemos a solicitar las correspondientes órdenes captura internacional y que le sean colocadas las respectivas alertas rojas.
Confiamos así en que la cooperación entre las autoridades dominicanas, francesas y la Interpol traerán a estos prófugos ante la justicia dominicana, donde deberán cumplir sus merecidas condenas.
