Washington, 7 nov (PL) La presencia hoy del aspirante presidencial republicano Donald Trump como anfitrión de uno de los más populares programas humorísticos de la televisión estadounidense, suscita rechazo entre activistas, artistas y líderes de origen hispano.
El controversial magnate fue invitado a conducir Saturday Night Live (SNL), de la cadena televisiva NBC.
Uno de quienes se oponen a tal actuación es el legislador demócrata por el estado norteamericano de Illinois, Luis Gutiérrez, quien solicitó a la televisora retirar la invitación al precandidato republicano a la Casa Blanca.
A juicio de Gutiérrez, la presencia de Trump en el espacio demostraría a la nación que "todo el odio racista expresado por este desde el lanzamiento de su campaña presidencial es aceptable y está bien".
Para los inmigrantes y los latinos, si se permite que el programa proceda con sus planes, sería una metida de pata corporativa tremenda, añadió en una carta a los propietarios del canal.
Tanto el congresista como numerosas voces de la comunidad latina en esta nación norteña repudian las declaraciones de Trump contra los inmigrantes.
Esta semana, varios manifestantes se reunieron frente a los estudios de NBC, en Nueva York, para pedirle a la cadena que cancele su participación en SNL.
La presencia del magnate de bienes raíces en el show humorístico supone para muchos el inicio de unas "segundas nupcias", luego de que el medio lo puso en la calle a mediados de agosto y canceló su habitual programa The Celebrity Apprentice.
Trump fue el anfitrión del programa The Celebrity Apprentice desde 2008, en el cual se hizo famoso por su bocadillo que pareció experimentar en carne propia: Estás despedido (You are fired).
NBC ya había tomado distancia del controversial político, después de las incendiarias declaraciones vertidas el 16 de junio al presentar su candidatura a la Casa Blanca, cuando consideró que los inmigrantes mexicanos eran drogadictos, violadores y asesinos.
Al igual que la cadena de habla hispana Univisión, la NBC canceló la transmisión de los programas de belleza Miss USA y Miss Universo, patrocinados por Trump, mientras voces del mundo artístico llamaron a un boicot de cualquier producto o evento que guarden relación con el empresario.
Una petición en internet recabó más de 200 mil firmas para que el canal televisivo lo despidiera.
Donald Trump rechazó ofrecer disculpas por sus comentarios, pese al alud de críticas y rechazos en su contra.
Esta será la segunda ocasión en que Trump conduzca SNL, después de servir de anfitrión en abril de 2004.
A principios de octubre la precandidata demócrata Hillary Clinton participó en una escena satírica del programa donde parodió a Trump.