El tenis, un deportes de élites, ha sido puesto en la picota, al revelarse arreglos en los partidos de más alto nivel mundial en combinación con las bancas de apuestas.
Estos incluye el torneo de Wimbledon, según revelaciones de la BBC y BuzzFeed News, que han puesto en el candelero un deporte que se suponía que por fuera de sospecha. .
Sin embargo, las revelaciones han establecido que en la última década, 16 jugadores que han estado clasificados dentro de los 50 del ranking de ATP han puesto en juego la integridad del tenis en varias ocasiones por las sospechas que han generado al haber regalado partidos.
Pese a esa sopecha, establece el informe, a esos jugadores identificados por sus malas prácticas, incluidos los ganadores de títulos de Grand Slam, se les permitió seguir compitiendo.
Ahora, puesto en evidencia, la Unidad de Integridad del Tenis -creada para vigilar el deporte blanco- dijo que no telerará más corrupción relacionada con apuestas.
El diario elpais.com señala sobre este caso que la trama mafiosa tendría origen en Rusia, el norte de Italia y Sicilia. La Unidad de Integridad del Tenis (TIU) -encargada de controlar posibles irregularidades- investigó 26.000 partidos desde hace siete años y de sus informes se desprende que algunos jugadores (que se reunían previamente con mafiosos en sus hoteles y pactaban la derrota a cambio de 50.000 dólares -46.000 euros- o más) se dejaron ganar.
El caso, además, salpica a Wimbledon, uno de los eventos deportivos más prestigiosos del mundo. Tres partidos del major británico habrían sido amañados.
El diario madrileño establece que en los últimos 10 años hay siete jugadores que han levantado un grande en individuales: el suizo Roger Federer (13 desde 2005, 17 en total), el español Rafael Nadal (14), el serbio Novak Djokovic (10), el suizo Stanislas Wawrinka (2), el escocés Andy Murray (2), el argentino Juan Martín del Potro (1) y el croata Marin Cilic (1).
Y agrega que BuzzFeed News empleó un algoritmo que detectó alteraciones en partidos en los que competían los 16 jugadores bajo sospecha.
La investigación partió a raíz del caso Davydenko. Entonces (2007), el tenista Nikolay Davydenko, que llegó a ser el número cuatro del mundo, perdió un encuentro en el torneo de Sopot (Polonia) contra el argentino Martín Vasallo-Argüello (87 del mundo entonces) cuando había ganado el primer set (6-2); después de ceder el segundo (6-3), el ruso se retiró en el tercero (con 2-1 en contra) por una lesión en un pie. Sospechosamente, el bote ascendió a cinco millones de euros, diez veces el montante habitual.