Puerto Príncipe, 22 ene.- Haití sigue hoy bajo tensión por la continua violencia y protestas de los candidatos opositores, en rechazo a la decisión del Gobierno de celebrar el domingo la segunda vuelta presidencial solo con el aspirante oficialista.
Según reportes de prensa, varios desconocidos incendiaron esta madrugada una escuela en Leogane -en el sur de Puerto Príncipe- que iba a usarse como centro de votación.
Otro grupo bloqueó en la mañana varias calles del centro de la capital y la oposición convocó a una marcha en la tarde contra el presidente Michel Martelly, en claro desafío a la veda vigente contra la realización de manifestaciones.
Los diarios locales también informaron sobre los intentos de algunos individuos por quemar anoche otros dos colegios en el noreste del país.
Incidentes similares e intensas marchas opositoras ocurrieron desde principios de esta semana en distintas regiones de la nación francófona, aunque el Gobierno se comprometió a garantizar la seguridad antes, durante y después de los comicios.
Martelly reiteró anoche que la votación transcurrirá con normalidad e instruyó a la policía y a la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas a velar por el correcto desarrollo del sufragio.
La crisis política en Haití se agravó desde que la semana pasada el candidato opositor Jude Celestin anunció su retirada de la contienda por considerar fraudulento el proceso electoral.
Aunque el jefe de Estado insiste en celebrar la votación solo con el oficialista Jovenel Moise, el primer ministro, Evans Paul, informó ayer que existen negociaciones para solucionar la situación y no excluyó la posibilidad de aplazar los comicios.
Organizaciones civiles del país y observadores internacionales están preocupados por la incertidumbre electoral y llaman a todos los actores políticos a consensuar un acuerdo que ponga fin a la crisis y permita elegir al sucesor de Martelly, quien prometió dejar el poder el 7 de febrero.
Haití abrió el ciclo electoral el pasado 9 de agosto con las parlamentarias, atrasadas por casi cuatro años debido a las discrepancias entre el Ejecutivo y la oposición.
El 25 de octubre se efectuó la segunda ronda de las legislativas y la primera de las presidenciales.
La apatía popular, la violencia y los roces entre los partidos rivales empañaron todos esos procesos, considerados indispensables para renovar las entidades democráticas y restablecer el equilibrio institucional en el país caribeño.
Prensa Latina-mgt/ymr