Siete de cada 10 latinos poseen una impresión muy negativa del multimillonario.
Una barrera importante para Donald Trump, en sus propósito de convertirse en presidente de los Estados Unidos, es la animadversión que ha creado entre los votantes hispanos que residen en ese país.
Una encuesta publicada este jueves midió la aceptación del precandidato republicano y encontró que alrededor de 80 por ciento de los hispanos residentes en Estados Unidos tienen una visión desfavorable sobre el citado aspirante presidencial
Prensa latina señala que la pesquisa, realizada por el diario The Washington Post y la cadena televisiva Univisión, mostró además que siete de cada 10 latinos poseen una impresión muy negativa del multimillonario, lo que es más del doble del porcentaje de cualquiera de los otros aspirantes a la jefatura de la Casa Blanca.
Trump utilizó el tema de la migración para ganarse adeptos entre los republicanos de línea dura, pero su retórica también le ganó las tasas más altas de rechazo entre los hispanos que el resto de los precandidatos del partido rojo, de acuerdo con el sondeo.
Entre los demócratas, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton tiene una ventaja de dos a uno en relación con su contendiente el senador Bernie Sanders, en cuanto al apoyo de los posibles votantes latinos, quienes como tendencia prefieren a los azules y no a los republicanos frente a un grupo significativo de temas.
Los realizadores del sondeo destacan que la opinión negativa generalizada sobre Trump se intensificó en los recientes siete meses, en la medida en que el multimillonario reiteró su propuesta de construir un muro a lo largo de la frontera México-Estados Unidos, y a la vez deportar a todos los indocumentados que residen en la nación norteña.
De acuerdo con The Washington Post, si Trump se convierte en el candidato republicano para las presidenciales de noviembre, su bajo nivel de apoyo entre los hispanos pudiera poner en peligro las esperanzas de su agrupación política de triunfar en los comicios.
En relación con Clinton, el magnate inmobiliario tiene el peor nivel de sustento entre los posibles electores latinos, (73 a 16 por ciento, a favor de la exprimera dama), cuando se le compara con la tasa de aceptación que disfrutan en ese grupo poblacional los senadores Marco Rubio y Ted Cruz así como el gobernador de Ohio John Kasich, todos precandidatos republicanos.
Las elecciones generales en Estados Unidos tendrán lugar el 8 de noviembre de este año y en ellas estarán en juego, además de la jefatura de la Casa Blanca, un tercio de los 100 asientos del Senado y los 435 puestos de la Cámara de Representantes, así como numerosos cargos en las legislaturas y gobiernos estaduales. ro/rgh