Si usted hubiese mantenido la posición por la que algunos les aplaudimos y les felicitamos en su visita a la República Dominicana, a finales de enero del 2013, no hubiese estado sometido al acoso y la persecución que le ha tocado vivir en los últimos dos años. Recuerde que nos dijo en el hotel Embajador, que no tenía planes de volver a aspirar a la presidencia de la República, primero porque Dilma Rousseff, debería tener la oportunidad de buscar la reelección, y que después había que dar paso a un nuevo liderazgo, porque ya usted había hecho sus aportes desde la presidencia.
Comprendo que lo entusiasmó su rol en la repostulación de Dilma, que fue determinante, y que la crisis de popularidad que ha caracterizado su segundo mandato terminara por persuadirle de que solo con usted, había garantías del mantenimiento en el poder del PT, y que empezó a posicionarse para el regreso, pero ese ha sido su peor error, en unas próximas elecciones al PT lo barren con o sin usted encabezando la boleta, y en único logro de su amago reeleccionista será el haber desatado contra toda su base de apoyo una persecución que no tiene ánimo ceder hasta convertirlo en un cadáver político.
Desde marzo del 2014, cuando la Policía Federal dio inicio a la operación Lava Jato, judicializada por el juez Sergio Fernando Moro, ser amigo suyo o sospechoso de haber colaborado con usted, es indicio de culpabilidad en un sistema judicial en el que las indagatorias se inician con prisión como la que padecen más de 60 personas, o de escrutinios como los que han padecido 232 empresas.
Con tal de que usted no valga una mota, no importa todo el daño que la acción le provoque a Brasil y a la imagen de sus empresas, muy distinto a como el país con el que usted buscaba asemejar la economía del suyo: Estados Unidos, manejó la crisis inmobiliaria del 2008.
Las últimas víctimas de la persecución, sus amigos Joao Santana y su esposa, Mónica Moura, que ambos tuvieron que abandonar la República Dominicana para regresar a Brasil a ponerse a disposición de la justicia, pero como aquí estamos en campaña y Joao, era asesor de Danilo Medina, como lo fue de usted, de Dilma, de Hugo Chávez, Nicolás Maduro, Ollanta Humala y Mauricio Funes, es natural que a unas indagatorias que no guardan ninguna relación con nuestro país se les quiera dar uno político.
Se han inventado que usted vino al país a condicionar la licitación de dos plantas a Carbón que actualmente se construyen en Punta Catalina, Peravia, región Sur del país, pero su visita fue 30 de enero 2013 y la publicación para los inicios de esa licitación fue en 13 de mayo del 2013.
Ha sido decisión firme del presidente Danilo Medina mejorar la capacidad de negociación del costo de generación incrementando la oferta de la generación más económica, torpedeada por los manejadores actuales del parque de generación que sacan mejores beneficios del sistema actual.
Saben bien que para el diseño de la obra y de los términos de referencias, así como para todo el manejo de la licitación se contrató la empresa estadounidense Stanley Consultants, con más de cien años de experiencia, que no se asocia a empresas vinculadas a los trabajo que realiza, y que lo menos que le hubiese interesado fuera favorecer a una brasileña.
Pero quienes entienden que el denuncismo infundado posiciona creen que con caso Jaoa descubrieron una mina de diamantes.
