Tamboril y el boom empresarial inedito que vive el municipio
Nicolás Santos
Tamboril no es solo un samán hermosísimo y una Ceiba gigantesca que deslumbra por su tronco descomunal.
El que durante mucho tiempo fuera un modesto y discreto municipio con su bucólico parque, sus calles umbrías y su condición pueblerina vive hoy un boom progresivo de auge económico con que no soñaron ni los mas optimistas.
Tamboril acoge hoy un desarrollo empresarial robusto y creciente con perspectivas de extensión internacional al proyectarse la instalación de empresas extranjeras, una de ellas brasileñas fabricante de calzados.
La que fuera llamada “aldea pajiza” por el gran poeta Tomas Hernández Franco alimenta hoy un desarrollo sostenido de zonas francas, almacenes de tabaco, un perfil de vida social creciente, empleos que llegan a ocupar incluso casas de familia para dar abasto a las demandas de la industria cigarrera.
Se trata de un fenómeno inédito pero que sigue la secuencia histórica de un Tamboril que viene de la tradición de los cigarros, los embutidos y otras empresas corporativas con tradición de familia.
Tamboril puede servir de plan piloto y de ejemplo referencial para instalar infraestructuras similares, aunque atendiendo a sus particularidades e historia, en otros municipios.
Este, de alguna forma es el premio que recibe un pueblo trabajador, entregado a sus labores, de tradición familiar.
No es un premio más sino la coronación de esfuerzos combinados sostenidos durante décadas por el trabajo continuo, la dedicación y la buena fe, que todas tienen un valor intrínseco.
Mientras otros pueblos vegetan en la espera de ayudas y solidaridades llenas de incertidumbre, Tamboril honra el trabajo esforzado de cada día.
Se halla destinado a ser un municipio satélite experimental de la organización moderna del mundo empresarial del Cibao.
Reúne condiciones especiales en el espíritu laborioso de sus habitantes, en el historial de esfuerzos.
Asimismo, en el hecho de que ha tenido la suerte de haber nacido en su suelo empresarios descollantes, artistas destacados, intelectuales, científicos.
Tamboril es un pueblo que puede exhibir con orgullo logros importantes.
Sin embargo, su modestia pueblerina es todavía el sello de identidad que en vez de avergonzarlo lo enaltece.