La misión de la Agencia Espacial Europea inició este lunes. Es la primera etapa de dos partes para explorar Marte y buscar signos de vida en el planeta rojo.
Se informó que la sonda no tripulada ExoMars, construida en colaboración con agencia rusa Roscosmos, y despegó el lunes en un cohete ruso, y se espera llegue a Marte en octubre. La sonda incluye una nave que orbitará en torno al planeta analizando gases en la atmósfera de Marte y un pequeño módulo que aterrizará en la superficie y pondrá un vehículo en el suelo de Marte en 2018.
La sonda europea Beagle 2 desapareció durante el proceso de aterrizaje en 2003, un revés que la ESA quiere evitar en esta ocasión. Las trazas de metano ya descubiertas en la atmósfera marciana indican actividad geológica o incluso biológica reciente en Marte, indicó Paolo Ferri, director de operaciones de misión de ESA.
La agencia RT informa que Roscosmos ha confirmado que se ha completado sin problemas la separación del cohete, pero aún será necesario esperar hasta las 21.00 GMT de este lunes para confirmar que la nave se encuentra en la órbita adecuada para viajar a Marte. "Estamos camino a Marte. Excelente", ha declarado el director general de la ESA, Jan Woerner.
El satélite se situará en la órbita de Marte el 16 de octubre de 2016 y la sonda Schiaparelli aterrizará en la superficie del Planeta Rojo. El satélite es una nave dotada con paneles solares y equipada con cuatro instrumentos científicos: dos aportados por la ESA y dos por Roscosmos.
La sonda Schiaparelli está equipada con sensores para medir el viento, la humedad, la presión atmosférica y la temperatura. Pero su misión principal será poner a prueba la tecnología de aterrizaje que la ESA necesita para enviar su todoterreno a Marte a partir de 2018.