La ex presidente Cristina Fernández compareció este miércoles ante un tribunal de Buenos Aires que conoce de varias acusaciones en su contra sobre actos cometidos en su gestión de gobierno.
La agencia argentina Telam informó que la audiencia comenzó minutos después de las 10 en el despacho de una secretaria de Bonadio en el cuarto piso de los Tribunales y al principio estuvieron presentes el abogado de Kirchner, Carlos Beraldi y el fiscal Eduardo Taiano.
La ex presidenta pidió la presencia del juez Bonadio y se le respondió que asistiría si ella aceptaba declarar.
"Bonadio ingresó al despacho cuando Cristina comenzó una exposición oral, saludó en general a todos los presentes y se ubicó detrás de la ex Presidenta, quien no lo saludó ni miró, contaron fuentes presentes en la audiencia, que se desarrolló en un clima tenso" según la reseña.
Ante el tribunal, la ex presidenta recusó al juez, de quien dijo tiene "una manifiesta aversión política hacia la suscripta que ha sido expresada públicamente cuando manifestó que tenía opiniones privadas sobre mi que se las reservaba, lo cual además de otras actitudes y otras intervenciones lo hacen manifiestamente arbitrario, parcial, orientado políticamente", arrancó Kirchner según el acta de la indagatoria a la que accedió Télam.
"Contestar preguntas no haría más que convalidar su manifiesta arbitrariedad, ilegalidad e incompetencia", respondió sobre su negativa a responder y en referencia a Bonadio, habría dicho la mandataria.
A su entender, la acusación "no tiene el menor asidero jurídico y técnico cosa que no me extraña dada la manifiesta incompetencia técnica de su señoría, como así también la manifiesta aversión política que tiene sobre la suscripta".
Antes de retirarse revisó el acta, pidió agregar que su apellido de casada era Kirchner, algo que se había omitido y efectuó otras correcciones.
En el juzgado, Fernández de Kirchner dijo vivir de su pensión como ex presidenta y "viuda de un ex presidente" y que consideraba que sus condiciones de vida era normales y sus ingresos "suficientes para cubrir sus necesidades básicas", según el acta.
Antes de hablar, a la ex presidenta se le leyó la acusación en su contra por la venta de dólar futuro por parte del Banco Central e interrumpió cuando la secretaria llegó a los cargos que Kirchner vinculó al delito de asociación ilícita.
La ex Presidenta dijo a la secretaria de Bonadio que esos cargos que se le leían se vinculaban a una asociación ilícita, que ella los sabía porque además de "ex presidenta, era abogada".