En la República Dominicana viene ocurriendo cada vez con mayor intensidad la muerte masiva de animales, particularmente perros y gatos provocadas por personas que no conciben convivir con esos animales. Algo insólito.
Recientemente en San Pedro de Macorís decenas de palomas aparecieron muertas misteriosamente.
Cuando me enteré no lo podía creer y tuve dudas por varias horas hasta que finalmente acudí al escenario de la tragedia.
Seres humanos de una increíble perversidad mental propiciaron el envenenamiento, así mismo el envenenamiento de decenas de palomas en el sector de Miramar, San Pedro de Macorís.
Supuestamente cansados de la presencia de tan distinguida y hermosa ave decidieron lanzar porciones de maíz revestido de veneno en las aceras de las calles Ramón Mota y Francisco M. Puello para hacerla desaparecer.
En esas vías del populoso e histórico barrio de Miramar de la Sultana del Este es común ver a centenares de palomas descender de los árboles y de los techos de las viviendas en busca de maíz que les facilitan parroquianos del lugar.
Hay personas que no resisten su presencia y sienten molestias por su profusa evacuación de heces acuosas y hasta por sus constantes movimientos.
Por supuesto lograron su macabra, indolente y cruel acción provocando segundos después la muerte de decenas de esas aves que fueron vistas caer en el pavimento por transeúntes de la zona.
Este doloroso y repudiable hecho debe ser investigado por las autoridades correspondientes para que no volvamos a ver la repetición de tan semejante salvajismo.
Me enteré de esa acción repudiable por un relato que difundió en Facebook nuestro amigo y compueblano, Ángel Camarena, quien reside en Nueva York. Posteriormente, acudí al lugar y tras conversar con varias personas pude confirmarlo.
Símbolo de la Paz
¡Caramba!, el animal que simboliza la paz mundial está siendo exterminado en el país por el hombre no tan solo para consumir su carne sino para deshacerse de su presencia.
Es un caso grave que merece una exhaustiva investigación de las autoridades de los Ministerios de Agricultura, Medio Ambiente y de la Unidad de Protección Animal del Ministerio Público.
No es posible que nuestro canibalismo llegue al extremo de provocar el exterminio de un ave tan hermosa, tierna y principal simbolismo de la paz en la tierra.
¿Hasta dónde vamos a llegar por Dios en la República Dominicana?
En la biblia, específicamente en Génesis 8:8-12se narra cómo Noé tras el diluvio envió una paloma que posteriormente regresó con un ramo de olivo en el pico como prueba de que las aguas habían cesado y que la tierra firme nuevamente estaba en condiciones de ser habitada por la especie humana.
Un congreso mundial por la paz en Paris, Francia, en 1949, es decir, cuatro años después de finalizar la Segunda Guerra Mundial exhibió un hermoso cartel de dibujos de palomas del español Pablo Picasso, quien estuvo en el evento junto al científico francés y Premio Nobel de Química, Frederic Joliot Curie y el poeta chileno Pablo Neruda.
El emblema de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) proyecta un ramo de olivo de simbolización de la paz adherido a un mapa del mundo cuya esencia es la convivencia y armonía.
En este mundo de violencia generalizada donde el irrespeto y violaciones a las normas de convivencia se reproducen constantemente, parecería que transitamos hacia un objetivo definido, sepultar la vida de las especies vivientes en la tierra.
Cuando vemos imágenes de la “muerte” de uno de nuestros ríos por la extracción indiscriminada de arena, la falsificación y adulteración de productos alimenticios y de medicamentos para combatir enfermedades, tenemos que preguntarnos: ¿hacia dónde iremos los seres humanos?
Protección para los Animales
En el año 2012, el país se sumó al gran listado de naciones que se encuentran en lucha constante contra el abuso, desamparo y maltrato a los animales mediante la aprobación y puesta en vigor de la Ley 248-12 de Protección Animal y Tenencia Responsable, que sienta las bases para lograr una protección efectiva garante del respeto y cuidados íntegros, cumpliendo así con el principio de Bienestar Animal.
No obstante, el maltrato a los animales en el territorio nacional prosiguió, razón por la cual las autoridades optaron por crear la Unidad de Protección Animal, dependencia del Ministerio Público.
Habría que ver si efectivamente en su aplicación la citada Ley 248-12, ha sido efectiva como para disminuir los constantes casos de abusos y maltratos a los animales.
Ahora en San Pedro de Macorís hay un movimiento gestor pro constitución de la fundación “Mascota Feliz”, que trabaja por el rescate de los animales en esta provincia a iniciativa de Marisol Acta; Adry Colmenares, Farah Miguel, Lizbeth Gómez y el veterinario Juan Carlos Bravo.
Un reconocido empresario y político de la Serie 23 tenía como uno de sus principales pasatiempo las cazas de palomas, patas y guineas en la provincia. Y a propósito es difícil ver en estos tiempos esos animales que enriquecían el habitad de la Región Este.
La mano depredadora del hombre “acabó con tó” como reza parte de las letras del merengue de Wilfrido Vargas bajo el título:”El Barbarazo”.
Domingo, 17 de abril del 2016