Si esos sismos no tuvieran lugar, "la tensión acumulada" provocaría "megaterremotos más catastróficos", según esta estimación.
(Publicado por RT) El devastador terremoto de magnitud 7,8 que sacudió Ecuador este fin de semana podría ser solo el principio, de acuerdo con Roger Bilham, un sismólogo de la Universidad de Colorado (Estados Unidos), quien asegura que "las condiciones actuales" en la cuenca del Pacífico podrían desencadenar, "al menos, cuatro sismos con magnitudes superiores a 8,0″ y, si se retrasaran, "la tensión acumulada" provocaría "megaterremotos más catastróficos", según informa 'Express'.
Otros científicos advierten que, desde comienzos de año, ha aumentado la media de terremotos importantes en el sur de Asia y el Pacífico. Esa circunstancia ha despertado temores de que se repita el temblor que vivió Nepal en 2015, en el que murieron 8.000 personas, o se produzca otra sacudida aún más grave.
Las condiciones actuales podrían dar lugar a, al menos, cuatro terremotos de magnitud superior a 8,0
Además, en estos momentos en el mundo hay 38 volcanes en erupción y eso crea unas condiciones propicias para que se produzca más actividad sísmica en la zona del Pacífico.
La noche de este 16 de abril, un potente terremoto de magnitud 7,8 sacudió Ecuador y provocó un mínimo de 272 muertos y 2.527 heridos, además de cuantiosos daños en diferentes partes del país.
¿Habrá otro 'Gran terremoto de Kanto'?
La semana pasada, al menos 42 personas murieron en Japón después de que dos temblores de 6,5 y 7,3 grados afectaran al suroeste del país, mientras que cerca de 250.000 personas recibieron la orden de abandonar sus hogares ante el temor de que se produjeran réplicas.
Cinco años después del sismo y posterior tsunami de 2011, los nipones temen que se repira un desastre que dejó más de 15.000 muertos.
Según 'The National Post', los científicos de la Universidad de Tokio estiman que existe un 98 % de probabilidades de que, en los próximos 30 años, Japón viva el equivalente al llamado 'Gran terremoto de Kanto' de 1923, que tuvo una magnitud de 7,8 en la escala de Richter y mató a alrededor de 142.800 personas. Por su parte, la Agencia Meteorológica de Japón rebajan esa probabilidad al 70 %.