No obstante, los países de la zona desarrollan trabajos particulares para eliminar los problemas existentes, por ejemplo, en Jamaica el Gobierno anunció a finales de 2015 la asignación 41 mil dólares para la limpieza de las toneladas de algas tipo sargazo acumuladas en sus playas.
De acuerdo con el director de Manejo Ambiental de la Agencia Nacional de Medio Ambiente y Planificación de ese país, Anthony McKenzie, entre las causas que generan este fenómeno atípico están el aumento de nutrientes en el mar, corrientes marinas y el cambio climático.
Al respecto, el dirigente aseguró que tienen localizadas las áreas afectadas y esperan conseguir despejar sus costas de esa alga, sumamente importante para la alimentación de los ejemplares jóvenes de tortugas marinas y para un sinnúmero de organismos que se reproducen en ella.
También se sumaron al día de la Limpieza Internacional de Costas, con especial importancia en la lucha contra ese tipo de algas, países como Trinidad y Tobago, San Martín, Puerto Rico, Barbados y otras islas de la región.
Puerto Rico se unió a la lucha contra la contaminación de las costas con el liderazgo de Scuba Dogs Society, organización dedicada a la conservación y educación ambiental.
Mientras, en República Dominicana se incrementaron los trabajos para retirar de las playas, sin deñar la arena y la biodiversidad, las algas marinas de color marrón conocidas como sargazo.
Para ello, el Ministerio de Medio Ambiente facilitó mallas para instalar en la entrada de la pequeña bahía de Boca Chica y otras playas aledañas para impedir el ingreso de las algas a la zona turística.
En Cuba, por su parte, el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente se plantea el manejo integrado de las zonas costeras como un área válida para el análisis y debate de acciones que materialicen los objetivos del desarrollo sostenible.
La protección de la zona costera y los cuerpos receptores marinos reviste para ese territorio una importancia vital, debido a que la longitud de sus costas alcanza más de seis mil kilómetros.
Estos espacios están afectados por problemas como la contaminación, el manejo inadecuado de las actividades pesqueras, la erosión costera, el aumento de la salinidad en aguas someras, la degradación de hábitats naturales y la pérdida limitada de la diversidad biológica en ciertas áreas.
En cuanto a la contaminación, inciden diversos factores, siendo el más importante de ellos el vertimiento directo e indirecto de residuales a la zona costera y aguas marinas.
De ahí que el referido ministerio trace estrategias en aras de solucionar el problema, apoyados en instituciones científicas y afines, estudiantes y organizaciones de masas, a través de las cuales se promueven programas comunitarios como el Acualina o el Jaimanitas.
También se elaboran programas de computación para transmitir a los niños en las escuelas la importancia de conservar las playas y para incitar a que los estudiantes colaboren en su limpieza, entre otras acciones.
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