Transcribo con tristeza este mensaje, que es un imperativo eco del pasado contra la desmemoria que poco a poco nos disuelve como nación: “No sé a quién decirle que estoy sorprendida y perturbada. Es que hoy he recordado cuando algunos dominicanos pidieron auxilio a la OEA en 1965. Voy a vomitar. Arlette”. (Arlette Fernández es la viuda del coronel Rafael Fernández Domínguez, patriota de inmensa dignidad, héroe y mártir de la Revolución de Abril que cayó combatiendo contra las tropas invasoras norteamericanas, legitimadas entonces por la OEA eufemísticamente como “Fuerza Interamericana de Paz”).