El dominicano de los Medias Rojas de Boston ha iniciado su retiro del béisbol y en un único turno en el juego de Estrellas del martes recibió una base en bola, avanzó hacia la primera base y allí de inmediato fue sustituido por su compatrita Edwin Encarnación. Desde ese momento se vivió un momento de emoción con la partida de David Ortiz.
Washington, 13 jul (PL) El receptor venezolano Salvador Pérez y el veterano toletero dominicano David "Papi" Ortiz acaparan titulares hoy tras el Juego de las Estrellas del béisbol de las Grandes Ligas de Estados Unidos.
Pérez, de los Reales de Kansas City, pegó un jonrón en la parte baja de la segunda entrada con un compañero en circulación para poner en ventaja al equipo de la Liga Americana que se impuso el martes 4-2 al de la Nacional en el choque efectuado en el Petco Park de San Diego, California.
Pérez y el estadounidense Eric Hosmer, ganadores de la pasada Serie Mundial con los Reales, la sacaron en la misma entrada para garantizar el triunfo del Joven Circuito.
El receptor suramericano y el primera base se convirtieron en el primer dueto de un equipo que se va para la calle en un mismo Clásico de Mitad de Temporada desde 2004 cuando lo hicieron los dominicanos David Ortiz y Manny Ramírez, de los Medias Rojas de Boston.
De acuerdo con el dato ofrecido por MLBStatsoftheDay, Hosmer y Pérez se convirtieron en el octavo dueto de compañeros de equipo con bambinazos en un mismo Juego de Estrellas.
La víctima de los cuadrangulares de Hosmer y Pérez fue el abridor dominicano de los Gigantes de San Francisco, Johnny Cueto. Por su parte, "Papi" Ortiz, de los Medias Rojas de Boston, no tuvo mucha acción con el bate, pero acaparó los reflectores en las mayores al ser protagonista en su último Juego de Estrellas.
Ortiz estuvo apenas dos episodios en el campo de juego y en el tercero fue sustituido por su compatriota Edwin Encarnación, de los Azulejos de Toronto.
El dominicano comprobó una vez más que es un líder en las Grandes Ligas y como tal fue despedido en su último Juego de Estrellas, pues lo 42 mil 386 asistentes al terreno se levantaron y vitoreando su nombre, mientras que todos sus compañeros de la Americana salieron del dugout para abrazarlo.
Esto es algo que nunca olvidaré, aseguró Ortiz poco después de salir del terreno y recibir el cariño de los presentes.
El venezolano Miguel Cabrera se entusiasmó tanto que frotó sus manos sobre la cabeza de Ortiz, hasta despeinarlo.
Le dije que ojalá cambie de opinión y no se retire durante muchos años, reveló Cabrera tras el encuentro.
El lanzador cubano José Fernández admitió que no podía creer que en realidad le estaba lanzando al estelar toletero caribeño, mientras que por la Nacional, el dominicano Marcell Ozuna, de los Marlins de Miami, colaboró remolcando una de las dos anotaciones que consiguió su equipo.
Este fue el primer Juego de Estrellas con dos lanzadores colombianos, José Quintana, de los Medias Blancas de Chicago, que trabajó en el relevo de la Americana, y Julio Teherán, de los Bravos de Atlanta, por la Nacional.
De los 27 peloteros latinoamericanos que estuvieron en San Diego, 23 vieron acción y confirmaron que sin su presencia el Juego de las Estrellas hubiese sido diferente.