La semana pasada fui invitado a la Universidad Católica de Santo Domingo a disertar en la conferencia “Censura en los Medios de Comunicación”, donde de entrada afirmé que en República Dominicana no hay libertad de expresión, sino libertad de intereses, debido a la limitación al libre ejercicio de prensa y difusión de la información, y no se puede ejercer el periodismo como lo instituye la Ley 6132 y la Constitución en su artículo 49 y siguiente, que establece; “La libertad de expresión e información. Toda persona tiene derecho a expresar libremente sus pensamientos, ideas y opiniones, por cualquier medio, sin que pueda establecerse censura previa. Toda persona tiene derecho a la información. Este derecho comprende buscar, investigar, recibir y difundir información de todo tipo, de carácter público, por cualquier medio, canal o vía, conforme determinan la Constitución y la ley”. Ningunos de estos incisos se cumplen porque chocan siempre con intereses de los propietarios de los medios de prensa.
Definí la cesura en el país en dos aspectos; represiva y económica, apoyándome en la primera y segunda intervención norteamericana, la dictadura de Trujillo y la Guerra Civil de abril del 1965, también en el período del presidente Joaquín Balaguer, mejor conocido como “los 12 años” de muertes y desaparición de periodistas y catedráticos que se oponían al régimen. Hasta nuestros días que sigue habiendo censura o autocensura para realizar la libertad de expresión y difusión del pensamiento.
La económica la sustentamos en que la mayoría de los dueños de medios de comunicación del país le tienen contratas en los gobiernos sin ser arquitectos ni ingenieros, siendo está una de las razones por las cuales la clase periodística comunicacional no puede informar a la ciudadanía con plena libertad tal como está instituido en la Constitución de la República Dominicana y las leyes sobre Libertad de Prensa e información, Expresión y difusión del Pensamiento.
En el Auditorio de la Biblioteca Cardenal Beras Rojas de la Universidad Católica, les dije a los estudiantes como estímulo, que no se den por vencidos en esta carrera tan bonita y compleja a la vez, que gracias a las censuras que me han hecho durante mi carrera periodística comunicacional de más de 16 años, he podido obtener logros y éxitos muy importantes tanto empresariales y comunicacionales. Los invité a que se apoyen en la tecnología y las redes sociales, como Twitter, Youtube, Facebook, Instagram, periódicos digitales, entre otras, ya que en el periodismo del siglo 21 le permiten a los profesionales de la información no ser coartados de su independencia y gracias a Dios el estado aun no ha tomado el control de estas, y en ellas todos tenemos igual derecho a difundir nuestros pensamientos e ideas sin que nos pongan cortapisa.
Al concluir nuestra exposición me correspondió contestar la pregunta que me hiciera el rector de la UCSD, reverendo Jesús Castro Marte, respecto a los riesgos a los que se exponen los familiares, amigos y relacionados de los periodistas, respondí que realmente me ha tocado vivir amenazas e intimidaciones de distintos sectores poderosos, que nos han visitado a nuestro hogar y oficina, tratando de persuadirnos para que abandonemos algunos temas sensitivos de gran peligrosidad que afectan sus intereses, no los dejo porque me apasiona lo que hago, el que no se arriesga no alcanza el éxito, a pesar de todo, eso es lo que me ha ayudado a crecer profesional y económicamente, “todo en esta vida es un riesgo”…
Nuestras posiciones causaron muchas interrogantes en los estudiantes con relación a que cómo van a hacer para ejercer su profesión de periodistas, le expresé que están muy bien las teorías que imparten en las aulas de las universidades del país, no obstante, señalé que en los medios de comunicación se encontrarán con otra realidad, cuando les corresponda realizar reportajes, entrevistas a líderes políticos y empresariales, o tener que denunciar cualquier anomalía o acto de corrupción, serán censurados dependiendo los intereses que prevalezcan en el medio para el que trabajen, le coartarán y violarán sus derechos constitucionales y de las legislaciones. Exhorté a los potenciales colegas a no desanimarse, ser aguerridos y no tener miedo a expresar sus ideas o pensamientos sin importar las consecuencias. En el momento en que le cohíban difundir informaciones como me pasó en el canal 19 y Telemicro, hagan tal cual hice yo, váyanse a otro medio, y si ahí le hacen lo mismo, busquen otros hasta que puedan lograr expresar la verdad sin que les pongan obstáculos.