Santo Domingo, 22 jul (PL) Mientras cientos de mujeres rechazan en las calles la decisión de los diputados dominicanos de prohibir todo tipo de aborto en el país, algunas autoridades valoran hoy las consecuencias de esa medida.
La modificación del Código Penal, tal como fue aprobado en la Cámara de Diputados, constituye un obstáculo para reducir la mortalidad materna e infantil, aseguró Nelson Rodríguez, director del Servicio Nacional de Salud.
La forma de cuidar a la mujer y favorecer su vida es no condenando a las madres a morir por una hemorragia u obligarla a tener el hijo de una relación incestuosa, precisó Rodríguez.
Prohibir el aborto terapéutico es una violación a los derechos de las mujeres y constituye un revés a los propósitos de bajar las altas cifras de morbilidad y mortalidad materna que registra el país, precisó.
Las leyes no pueden obviar los indicadores de salud del país, insistió Rodríguez al rechazar que establezcan penas de hasta 10 años de cárcel al personal de salud que participe en un acto abortivo.
Consideró que la penalización no va a impedir la realización de abortos, pero conlleva a que se efectúan en condiciones de inseguridad que ponen en peligro la vida de la mujer.
En tanto el presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD), Waldo Ariel Suero, acusó a los diputados de haber asumido posiciones políticas e inhumanas.
Han antepuesto sus intereses políticos frente a una realidad que es la interrupción de un embarazo por condiciones terapéuticas, sin sopesar las consecuencias de la medida, dijo.
La inviabilidad del feto por anencefalia, por incesto y violación sexual son modalidades que deben ser tomadas en cuenta, añadió Suero quien dijo no estar de acuerdo con el aborto criminal pero sí con el terapéutico.
Acusó a los legisladores de contribuir con esa decisión al aumento de la mortalidad materna y al incremento del aborto clandestino con todos los riesgos que conlleva contra las mujeres.
Ha sido una acción de los legisladores totalmente política e inhumana y no una acción de carácter social y mucho menos profesional, dijo Suero al definir lo aprobado por los parlamentarios.
mem/rr