La Habana, (PL) La actividad del ser humano provoca que muchas especies se extingan y otras aparezcan o evolucionen rápidamente, un proceso que causará en la Tierra una nueva era geológica, el Antropoceno.
En un estudio, dirigido por el Centro de Macroecología, Evolución y Clima de la Universidad de Copenhague, explica que, mecanismos como la introducción accidental, domesticación de animales y cultivos; así como, la selección no natural debida a la caza, o la aparición de nuevos ecosistemas tales como el medio ambiente urbano; contribuyen a la extinción de especies y rigen su evolución.
Los autores subrayan que los animales silvestres desaparecidos no pueden ser reemplazados por los recién evolucionados y que la conservación de la naturaleza es urgente.
Obtener "artificialmente" nuevas especies a través de las actividades humanas no compensa las pérdidas de animales naturales", señaló el autor principal de la investigación, Joseph Bull.
Uno de los ejemplos de cómo las actividades humanas afectan la evolución es la forma en que el mosquito común se adaptó al medio ambiente del sistema de metro en Londres y estableció una población subterránea.
Ahora, llamado el "mosquito del metro de Londres", no puede mezclarse con sus contrapartes en superficie y se piensa que es una nueva especie, indicó Bull.
Otra indagación reciente reveló que al menos seis de los 40 principales cultivos agrícolas del mundo se consideran totalmente nuevos.
A ello se suma que la selección no natural producto de la caza, puede conducir a nuevos rasgos emergentes en los animales, que luego terminarán en la formación de nuevas especies.
Por otro lado, la reubicación deliberada o accidental de estos ejemplares llevará a la hibridación con otros.
Los investigadores coinciden en que las tasas de extinción actuales pueden dar lugar a un sexto período de extinción masiva.
Desde la última edad de hielo, hace 11 mil 500 años, se estima que 255 mamíferos y 523 especies de aves se han extinguido, debido a la actividad humana.En ese mismo periodo, casi 900 especies han sido reubicadas; y más de 470 animales y 270 especies de plantas fueron domesticados.
Causas del Antropoceno
Hasta el momento, los especialistas se basaban en las capas de las rocas, los fósiles y evidencias geoquímicas para definir un capítulo en la historia geológica; pero las acciones derivadas de la sociedad industrial modificaron la evolución de la naturaleza.
Los geólogos publicaron el sitio web Gizmodo seis evidencias que han contribuido al llamado Antropoceno. En primer lugar: los fósiles tecnológicos.
Según los expertos, la humanidad genera a gran escala basura que no se descompone: "tecnofósiles"―desde CD-ROM y vasos de plástico, hasta chatarra electrónica― los cuales podrían permanecer en la Tierra durante miles de millones de años, sobreviviendo incluso a la humanidad.
Por otro lado están los fósiles reales a los cuales tributarán en el futuro, las especies que desparecen rápidamente o llevadas a lugares que no son su hábitat natural y el incremento poblacional del planeta.
A estos se suma la contaminación de carbono provocada por la quema de combustibles fósiles y liberación de enormes cantidades de este gas.
Los especialistas señalan que el dióxido de carbono calienta el clima y remodela la química atmosférica.
También integran la lista los fertilizantes de nitrógeno tales como el denominado proceso de Haber-Bosch.
Los químicos Fritz Haber y Carl Bosch propusieron utilizar la alta presión y el calor para convertir el nitrógeno atmosférico en fertilizante amoníaco, haciéndolo barato y de acción rápido, lo que duplicó la cantidad de dicha sustancia que circula activamente en la biosfera.
La excavación y explotación de la corteza terrestre, son actividades que dejarán "cicatrices" en la faz de la Tierra, apuntaron los geólogos.
Por último, el desarrollo del armamento nuclear será un punto clave en la era del Antropoceno.
Algunos científicos argumentan que la fecha sería 1964, año de pruebas de armas nucleares tan grandes que provocaron un repunte dramático en la cantidad de carbono radiactivo, o carbono-14, en la atmósfera.