Andrés Bautista, Presidente del Partido Revolucionario Moderno (PRM) afirmó que si con el diálogo entre las fuerzas sociales y políticas que coordina el Monseñor Agripino Núñez Collado se quiere superar las deficiencias del sistema electoral y de los partidos políticos dominicanos, entonces tiene concluirse en un pacto político que sea respetado y aprobado por Congreso Nacional, sancionándolo como el marco jurídico del Estado para normar todo lo relativo a las elecciones y las agrupaciones políticas.
Asegura que el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) tiene todo el control de las cámaras legislativas y de las Altas Cortes, y las ha utilizado para hacerse un “ traje a su medida” para la impunidad de sus miembros y para asegurarse triunfos electorales ilegítimos y fraudulentos, lo que le resta calidad moral y no merece la confianza de que se le permita continuar utilizando esas mayorías en la organización del Estado y el proceso electoral.
“Llegó la hora de que los dominicanos nos detengamos a reflexionar sobre el país que queremos, analizar si creemos y queremos como nación que vamos bien y que debemos dejar que las cosas sigan como van, o por el contrario, si creemos y queremos que las cosas cambien, entonces asumamos que llegó el momento para provocar un cambio en la situación general del país”.
Dijo la institucionalidad del país es muy débil, debido a que cualquier ciudadano desnaturaliza las leyes, las viola y nada le pasa, amparado en el manto de impunidad que le garantiza el gobierno y el PLD, por lo que, ahora, solo a quienes no son de ese partido y sus colaboradores es a quienes se le aplican las leyes .
Insiste que debemos definir quienes son los dialogantes y luego definir la agenda, cuyos puntos principales deberán ser, primero, escoger los miembros de los órganos electorales que aplicarían las nuevas leyes creadas para regir el sistema electoral.
Argumentó que la calidad moral, la fortaleza personal, la conducta intachable e imparcial de los miembros de los órganos electorales, es fundamental para unas elecciones equitativas y transparentes en el país, de lo contrario, no importan las buenas leyes, si no existen hombres y mujeres honestas que las hagan cumplir.
Dijo que los miembros de las altas cortes y los órganos electores actuales son representantes de partidos políticos, no son jueces, son fruto de un modelo fracasado de reparto de cargos entre los partidos que apoyan al PLD, lo que no recibirá el apoyo del PRM para repetirlo, y eso debe salir del diálogo franco y honesto que tratan de celebrar los actores políticos, empresariales y sociales del país.
Por eso, asegura, el problema institucional electoral del país, no es tanto la falta de leyes, sino de los actores y su bajo nivel de integridad moral y ética para aplicar las leyes que tienen que hacer cumplir y así conducir un certamen electoral que fortalezca la democracia.
Reitera que la posición del PRM es que los miembros de esos tribunales sean personas apartidistas, que no respondan a directrices directas y de obediencia de los órganos de dirección partidaria alguna, al tiempo de afirmar que en la sociedad a existen miles de esos ciudadanos que aspiran a un país mejor y les preocupa y están dispuestos a contribuir por cambiar el destino para la nación dominicana.
Añadió que el PRM y sus miembros están haciendo cada día los mejores esfuerzos para que la dignidad del país y de los partidos sea fortalecida, que la sociedad pueda ver en esta organización política, una entidad confiable, diferente y capaz a encabezar el cambio de rumbo que lleva el país.
Dijo que la población conoce de los traumas y dificultades encontrados en el proceso de formación del PRM y aun así, observa el rol digno desempeñado por el mismo y el gran espacio que logrado en tan poco tiempo, algo que no había ocurrido en el país.
“No continuaremos haciendo las cosas con vicios del pasado, tenemos que cambiar y estamos decididos a ser diferentes”, afirmó.
Manifestó que de ahora en adelante, un legislador del partido no podrá tomar decisiones personales en los temas cruciales del país, ese legislador, diputado, senador, regidor o alcalde, no podrá tomar decisiones para beneficios particulares ni personales, y quien lo haga se encontrará con las normas establecidas en los estatutos.
Dijo que si el PRM va a jugar su verdadero rol de la oposición con dignidad tiene que sanear esas inconductas y ponerse con firmeza al lado de los mejores intereses del pueblo dominicano y así tiene que hacerlo todo quien represente una curul ganada por los votos del partido.