SANTO DOMINGO.- El relanzamiento del Consejo Estatal del Azúcar (CEA) es posible y urgente, afirmó el doctor Pedro Richardson, secretario de asuntos municipales del PRD, garantizando con ello más de 10 mil empleos.
Sin embargo Richardson, cree que para lograr el relanzamiento del CEA es necesario, que el mismo debe estar basado en que aparte de su gestión inmobiliaria siga siendo rector de la política cañera del país enfocado en la sustitución de importaciones azucareras y la generación de empleo.
Entiende el dirigente político que “en los próximos 4 años debemos dirigir una estrategia para anular las aproximada 100,000 toneladas de azucares importada y la generación de un mínimo de 10,000 empleos”.
En carta dirigida al presidente Danilo Medina, Richardson estima que todo esto debe ser logrado desde una gestión autosostenible y sustentable partiendo de la utilización de los recursos propios del CEA y de las alianzas estratégicas que permitan el logro de estos objetivos.
Propone cuatro puntos indispensable para lograr el relanzamiento del CEA primero: lograr la anulación de las importaciones de azucares y reforzar la producción de materia prima para incrementar las exportaciones de ron.
2. Lograr la generación de 10,000 nuevos empleos en las provincias cañeras.
3. Continuar de forma decidida y mas colaborativa, los procesos de titulación dirigido por el presidente de la Republica.
4. Fortalecimiento de la Cooperativización de sector canero.
Para la consecución del objetivo 1 es necesario una Alianza con los ingenios existentes, tanto publico como privado, para incrementar la producción de azucares y melaza para la producción de ron, mediante un enfoque de reducir las limitantes que están identificadas como serian:
a) Incremento de producción de caña de azúcar en un mínimo de 1 000,000 de toneladas de caña.
b) Financiamiento a la mecanización total y/o semimecanización del cultivo.
c) Lograr la generación de 10,000 nuevos empleos en las provincias cañeras implica trabajar en varias acciones estratégicas como serian, incremento de la molienda en 1 millón de tonelada mediante el involucramiento de 1,000 pequeños productores y sus familias en el cultivo, además de 2,000 empleos desde operaciones de maquinas y trabajadores de campo.
El segundo foco de empleo-entiende Pedro Richardson- seria los mismos ingenios existentes y la continuación de la construcción de 2 pequeños ingenios anunciados por el presidente pero con producción más diversificada y mercada más segura.
Asimismo la promoción de un amplio programa en los bateyes y zonas cañeras para la inserción laborar y el emprendedurismo, y apoyo a un amplio programa de seguridad alimentaria en las zonas cañeras mediante el fomento de huertos y cultivo bajo ambiente controlado.
Y finalmente apoyo a la alianza con IDAC, CNE, DIGEPEP, MIC, líneas aéreas y otros, para el cumplimiento del acuerdo de Paris y reducción de contaminación ambiental, mediante la promoción de biocombustibles para aviación a partir de caña de azúcar, mediante la construcción de una planta piloto, con tecnología ya validada, en Republica Dominicana.
Es necesario continuar y agilizar de forma decidida los procesos de titulación de parceleros, que se han estado realizando en colaboración con el IAD al igual que las villas cañeras o bateyes, cuyas viviendas deben ser asignadas a los antiguos ocupantes.
El fortalecimiento de la economía solidaria en las zonas cañeras, mediante la cooperativización, vislumbrando una posible disminución en las acciones del CEA, puede ser una excelente opción para socializar este patrimonio.
Para ello es necesario la apertura y puesta en funcionamiento de la Cooperativa Cañera ordenada por el decreto 642-96, basada en un modelo empresarial adaptado a nuestro país, como son COOPERCANA de Brasil, Guabirá en Bolivia, Sugar House en Estados Unidos, COOPEVICTORIA y COOPEAGRI en Costa Rica por solo mencionar algunos.
›Esta cooperativa fortalecida y abierta integrada por colonos y trabajadores de la cana y el estado representado por el CEA, en una cogestión inicial puede ser la vía para socializar el patrimonio canero y tendría a su mano la gestión del ingenio Porvenir, y los dos pequeños nuevos ingenios. Una gran parte de sus beneficios irían reglamentados a proyectos comunitarios.
Hecho esto en el 2020 la visión del CEA seria una agroindustria que satisface las demandas internas de azúcar y mieles, compuesta por ingenios de propiedad pública y privada, con productores de caña integrados mediante cooperativas, generadora de empleos sostenibles y que contribuye con políticas públicas de alto interés nacional.