El colombiano estuvo en el escenario durante dos horas con un repertorio que incluyó temas de toda su trayectoria
CASA DE CAMPO, LA ROMANA.- Como parte de su espectáculo “La fiesta de todos”, el cantante colombiano Carlos Vives abarrotó la noche del sábado el anfiteatro de Altos de Chavón, con una presentación que no tuvo desperdicios.
Sin duda alguna, el intérprete de “Fruta fresca”, recogió lo mejor de su trayectoria para presentarlo en la fiesta colombiana en la que convirtió el show. El ritmo de su tierra, el baile y la sencillez que le caracteriza quedaron evidenciados en cada momento del concierto que inició a las 9:04 de la noche.
A ritmo de “Ella”, del álbum “La tierra del olvido” (2012), llegó Carlos Alberto Vives Restrepo, nombre completo del artista, al escenario ubicado en Casa de Campo y continuó revelando el cancionero que finalizó al sumar 19 temas pasadas las 11:00 de la noche.
Desde tempranas horas, en el anfiteatro se veían por hdoquier banderas colombianas entre la multitud que se dio cita a cantar y aclamar temas como “Déjame entrar”, “Carito”, ”Quiero verte sonreír”, “Gota fría”, para la que utilizó una guitarra de brillo plateada, “Fruta fresca”, con la que terminó de encender aún más a la audiencia, “Ella es mi fiesta”, entre otras.
“Quiero aprovechar y saludar a mis hermanos colombianos, que nunca me abandonan. Se han encargado de llevar nuestra música a todas partes. Me encanta que logremos eso, que nos conozcan, que nos quieran como lo han hecho en este país”¨, dijo minutos después de haber saludado a la audiencia del espectáculo que contó con el patrocinio de Brugal.
El cantante de 55 años, no paró de recorrer el escenario, contar anécdotas, patear una pelota de fútbol que luego lanzo al público, acercarse para las ´selfies´, recoger detalles, una gorra entre ellos, hacer referencia al perico ripiao´ y disfrutar en cada entrega con visible entusiasmo de los ritmos caribeños que lleva más de 30 años interpretando.
A la hora de interpretar “Quiero casarme contigo”, Carlos Vives invitó al escenario a una pareja de la que únicamente el novio fue identificado como “Federico” y durante la interpretación, tanto Vives como el novio se arrodillaron ante la novia para hacer la petición y sellar el romántico momento.
El artista recordó que hace 23 años empezó a internacionalizar su música, con los ritmos de su país y que en 1998 se presentó en La Romana en apoyo a los afectados por el ciclón George.
Acompañado de sus 11 músicos y dos coristas, agregó en su repertorio “El mar de sus ojos”, la cual es una colaboración con la agrupación Chobquibtown, “Nota de amor”, con Daddy Yankee y Wisin, “La foto de los dos”, “La tierra del olvido” y “Cartagena la fantástica”.
“Gracias a mi gente de toda esta isla por siempre apoyarme pero sobretodo, por no olvidarme”, dijo al despedirse. Desapareció del escenario y tras los acordes que indicaban que el resultado de su junte con Shakira era lo siguiente, Carlos Vives apareció en el escenario montando una bicicleta sobre la cual interpretó el tema que cuando escribió llamó “Vallenato desesperado”.