El autor peruano resaltó que toda América Latina debería reconocer la labor del ensayista, crítico y escritor dominicano.
Santo Domingo.-El Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, ponderó la dimensión universal del dominicano Pedro Henríquez Ureña (29 de junio de 1884 – 11 de mayo de 1946), de quien dijo no ha recibido todos los reconocimientos de los que es merecedor.
El escritor peruano hizo las consideraciones en el discurso que pronunciara al recibir, este lunes, el Premio Internacional Pedro Henríquez Ureña, en el marco de la ceremonia Inaugural de la XIX Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2016 (FILSD 2016), la que encabezaron la vicepresidenta Margarita Cedeño de Fernández y el ministro de Cultura, Pedro Vergés.
El Premio Nobel, de quien el ministro Vergés dijo es un invitado especial a la FILSD 2016, recibió el galardón de manos del ex ministro de cultura, José Antonio Rodríguez, y del comisario del Pedro Henríquez Ureña, Luis O. Brea Franco, en el Teatro Nacional Eduardo Brito.
GRANDEZA DE PEDRO HENRÍQUEZ UREÑA
Durante su discurso de agradecimiento, Vargas Llosa dijo sentir una gran alegría por recibir este premio de República Dominicana, especialmente porque fue creado en homenaje a Pedro Henríquez Ureña, a quien leyó por primera vez cuando era estudiante universitario.
“Leí los Seis ensayos en busca de nuestra expresión. Me sorprendió la sabiduría con que ese libro estaba escrito y, al mismo tiempo, la desenvoltura con que podía llegar a un lector desinformado para quien buena parte de los libros de autores citados eran desconocidos”, explicó.
Vargas Llosa agregó que desde entonces intentó encontrar otros libros, ensayos y artículos del crítico, escritor y ensayista dominicano, quien fuera un intelectual y filólogo.
En su valoración sobre la obra literaria y personalidad del dominicano, Vargas Llosa dijo que era un crítico que de alguna manera representaba aquello que mi generación de autores latinoamericanos tenía como modelo.
Se refería a la existencia de una literatura con raíces profundas en lo propio, pero que se volcara más allá de las fronteras nacionales, que incluso trascendiera las fronteras de la propia América Latina.
SU UNIVERSALIDAD
Consideró que se entendía en ese entonces que la literatura debía tener un horizonte universal y cotejarse con las literaturas de otras lenguas y adoptar una perspectiva que encontrara denominadores comunes, “que existen por debajo de todas las diferencias de lenguas, costumbres, tradiciones; todo aquello Henríquez Ureña lo representó en sus escritos”.
Fue cuando entonces definió a Henríquez Ureña como un dominicano que amaba su país, pero que nunca fue un provinciano culturalmente hablando.
“Desde muy joven entendió que la literatura debía ser universal o simplemente no lo era. Desde muy joven se sintió un dominicano latinoamericano. América Latina fue su pasión, pero nunca pensó en lo latinoamericano como una cárcel, como una isla enfrentada al resto del mundo”, afirmó.
Anotó que Europa era de interés para Henríquez Ureña: “nunca fue un diletante de las otras culturas, a todas ellas las conoció muy de adentro, y buena parte de su obra consistió en volcarlas para que los hispanohablantes las conociéramos y aprendiéramos a través de él”.
Llosa aseguró que Henríquez Ureña no ha recibido el reconocimiento que merece, pero aclaró que en República Dominicana empieza a recibir todos los homenajes que debería rendirle América Latina entera por la extraordinaria valoración que hizo de lo latinoamericano a través de sus ensayos.
“Creo que se sentiría realizado a través de lo que sería más tarde el reconocimiento de la literatura latinoamericana por el resto del mundo”, afirmó el Premio Nobel de Literatura.
Al concluir sus palabras, aseguró que recibir este galardón es un mandato a seguir su ejemplo.
El Premio Internacional Pedro Henríquez Ureña fue instituido por el Estado Dominicano, mediante decreto presidencial 93-13, de fecha 27 de marzo del 2013, y modificado por el número 477-14, del 25 de noviembre del 2014, para reconocer la productividad literaria, la crítica y la creación de pensamiento en la obra de toda una vida.
El jurado seleccionador, designado en el decreto, estuvo integrado por los escritores Sonia Henríquez Toledano Vda. de Hlito, presidenta de honor y el doctor Luis O. Brea Franco, comisario del premio y asesor general del ministro de Cultura.
Lo integraron, además, los miembros: doctores Liliana Weinberg, Néstor E. Rodríguez, Miguel D. Mena y Ramón A. Victoriano Martínez. Todos expertos que imparten docencia en universidades de Estados Unidos, Europa, Canadá, México y República Dominicana.