Entre terremotos y huracanes, Haití no logra el camino del desarrollo y el progreso. Cuando avanza hacia un destino, algún fenómeno lo detiene, y si este no aparece, se enreda en su maraña de conflictos e intereses.
Tenía previsto celebrar elecciones el domingo, para tratar de reponerse a los fracasados comicios de hace cerca de un año, y una semana antes es azotado por el ciclón Matthew que ha obligado a suspenderlos.
Matthew, se estima que al menos dejó 26 personas muertas en Haití y República Dominicana, que comparten la Isla La Española, pero esa cifra podría subir este jueves conforme se acceda a las zonas rurales haitianas más afectadas.
La tormenta derribó puentes y el acceso desde Puerto Príncipe, la capital haitiana, hacia el resto del país se ha dificultado.
El asistente del representante de la ONU en Haití, Mourad Wahba, dijo que el huracán Matthew ha causado la mayor crisis humanitaria allí desde el terremoto de 2010 que causó la muerte de 225.000 personas.
Los estragos de la tormenta obligaron a las autoridades a posponer la elección presidencial programada para el domingo, debido a que muchas escuelas e iglesias que estaban supuestas a servir de recintos electorales están siendo usadas como refugios para los desplazados.
stados Unidos para el Desarrollo Internacional, USAID, dijo que se trabaja “muy diligentemente” junto a los servicios de Socorro Católico y la Cruz Roja para asegurarse de que la ayuda necesaria llegue a la gente más vulnerable de Haití.