Reinaldo Pared Pérez, secretario general del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) negó que esa organización haya pactado con otro partido la elección del secretario general de la Liga Municipal Dominicana.
Aunque no mencionó su nombre, Pared Pérez se refirió a las versiones de dirigentes perredeístas que dan cuenta de la existencia de un acuerdo para ambos partidos repartirse la gestión de los próximos cuatro años en la Liga Municipal Dominicana (LMD). De acuerdo a lo dicho, Ignacio Ditrén presidiría ese organismo los primeros dos años y Neney Cabrera, del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) los dos años siguientes.
“Dije y repito que la LMD no formó parte de ninguno de los acuerdos o pactos de alianza que concertó el PLD.”, escribió Pared Pérez en su cuenta de twitter en la que también aclaró que fue firmante de todos los pactos de alianzas firmados en las pasadas elecciones.
“Quien suscribe los firmó todos” agregó el secretario general peledeísta reiterando así sus declaraciones de la semana anterior en la que afirmó que el Partido de la Liberación Dominicana nunca ha dirigido la Liga Municipal Dominicana y que ya es tiempo de que lo haga.
Manifestó que si algo es preciado y debe mantenerse siempre en el PLD, es el respeto y la observancia institucional a sus autoridades partidarias.
“He tenido muy claro la ascendencia e incidencia de Danilo y Leonel; pero en la toma de decisiones del PLD, ambos nos consultan siempre”, indicó Pared Pérez.
Estas y anteriores declaraciones han generado niveles de animación en la militancia del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), con las que se confirman la condición unitaria predominante en la tropa morada.
En un trabajo con la firma de Héctor Olivo, secretario de comunicaciones del PLD, publicado en Vanguardia del Pueblo Digital se afirma que la postura pública del secretario general del PLD ha reanimado la militancia partidaria sentida, hasta cierto punto, por desvinculaciones de dirigentes de la administración pública sin justificación alguna que ya ha merecido una amonestación del ciudadano presidente de la Republica a ministros y directores departamentales.