El presidente del Partido de la Liberación Dominicana, Leonel Fernández, considera como positivo el balance de la gestión Barack Obama en la presidencia de los Estados Unidos que concluirá el 20 de enero.
El ex mandatario dominicano afirma que el ascenso al poder de Obama marcó un precedente al convertirse en el primer presidente negro que llega a la Casa Blanca.
Leonel Fernández hace su esbozo sobre el gobierno de Obama en su columna Observatorio Global, publicada este día en el Listín Diario y Vanguardia del Pueblo Digital, reseñada por la Secretaría de Comunicaciones del PLD, donde refiere que al alcanzar el poder, ese descendiente de esclavos se enfrentaría a graves desafíos, siendo el primero de ellos la dramática crisis económica.
“Lo hizo con determinación. Al cabo de ocho años, el desempleo disminuyó de un 10 a un 4.7 por ciento. La economía se ha mantenido estable y ha crecido a un ritmo apreciable para un país de las dimensiones de los Estados Unidos”, resaltó Fernández.
El expresidente de la República recordó que Obama se esforzó para que millones de ciudadanos estadounidenses, tradicionalmente excluidos del sistema de salud y seguridad social, quedaran formalmente integrados. “Construyó carreteras, puentes y ferrocarriles”.
Tras una sintética reseña de su trayectoria política, Fernández explica que fruto de los logros conquistados, Barack Obama fue reelecto en los comicios del 2012, al enfrentarse al candidato del Partido Republicano, el ex gobernador por el estado de Massachusetts, Mitt Romney.
Leonel Fernández subrayó que como acontece con toda figura pública, la obra de gobierno de Barack Obama estará sujeta al juicio de la historia. “No se trata, por supuesto, de una obra perfecta. Nada humano lo es. Pero cuando con el paso del tiempo se coloquen en una balanza, los activos de su gestión pesarán más que los pasivos”.
Precisó que habiendo heredado un ambiente de confrontación militar, no creó ningún nuevo escenario de conflicto bélico para su país ni para el mundo y que retiró las tropas norteamericanas de Irak, tal como había prometido durante su campaña electoral. “Se enfrentó a los terroristas de Al Qaeda en Afganistán, eliminando a su principal cabecilla, Osama bin Laden”.
Dijo que Obama negoció un acuerdo sobre enriquecimiento de uranio y desarrollo nuclear con Irán. Apeló a los mecanismos multilaterales de resolución de conflictos, y dio señales de preferencia por la diplomacia, en lugar del enfrentamiento armado.
Destacó que estableció relaciones diplomáticas con Cuba, luego de más de medio siglo de ruptura y aislamiento y nombró a un enviado especial para las negociaciones de paz del gobierno de Colombia con las fuerzas guerrilleras de las FARC.
“En fin, creyó más en un mundo multipolar, guiado por normas del Derecho Internacional, que en un mundo unipolar, hegemónico, de imposición sobre la base de la fuerza”, concluye Fernández en su artículo “El legado de Obama”.