Santo Domingo,- El Ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Francisco Dominguez Brito, reveló que como consecuencia de la contaminación a que ha sido sometido el Parque Nacional de los haitises, la región Este del País se está quedando sin aguas subterráneas.
El licenciado Francisco Domínguez Brito anunció que para el mes de febrero, que inicia este miércoles, comenzará el proceso de desalojo de todas las personas que están ocupando predios en los parques de la Sierra de Bahoruco y los haitises.
Domínguez Brito advirtió que no es posible que el Parque Nacional de los Haitises continúe con el proceso de deterioro que hoy experimenta, lo que obliga a la institución que dirige a actuar para revertir esa situación.
Entrevistado por Héctor Herrera Cabral en el programa D´AGENDA que cada domingo se difunde por Telesistema Canal 11, el funcionario explicó que muchos de los canales de aguas subterráneas que salen de los Haitises se han secado y no pasa agua dulce.
Deploró que todas las aguas que nacen en esa área protegida y que van al Este del País, las cuales nutren los pozos que se utilizan para la ganadería y la agricultura, se están secando.
“La lucha de Valle Nuevo es ahora en enero, pero en febrero empezamos con Sierra de Bahoruco y con los haitises”, sentenció Francisco Domínguez Brito quien recordó que para el presidente Danilo Medina el rescate de los bosques, cuencas hidrográficas y áreas protegidas es una prioridad.
El funcionario dijo que la situación del Este es tan dramática que al secarse los canales que transportaban el agua dulce de los haitises, el agua del mar está entrando y cuando se perfora un pozo el líquido que sale es de sabor salobre.
“Dentro de 15 años, serán 12, 13 o 25 kilómetros del mar hacia el interior del país que será agua salobre, qué será dentro de 40 años en el Este, solo agua salada en cada uno de los ríos subterráneos porque habrá desaparecido la fuente de agua dulce que los nutre”, explicó.
Sostuvo que esa situación no puede continuar, y por lo tanto la decisión es ahora porque quizás no se ven los resultados en dos o tres años, pero las futuras generaciones merecen que se actué ya, y por lo tanto es un deber que se comience a corregir ese problema.
Argumentó que la situación por la que atraviesan los bosques es de tal magnitud que si no se detiene el derrotero por lo que va transitando, la isla completa sufrirá graves sequías, siendo la situación más crítica para Haití cuyas aguas que reciben salen desde la República Dominicana.