Catalunya.-Hoy comienza en Catalunya el juicio a los promotores del referendo del 9N. Un juicio que pone en jaque a los últimos cuarenta año de la historia de la actual España. Un Juicio que nos hace a todos plantearnos qué es lo prioritario, lo más importante, las leyes, los textos constitucionales o la propia democracia.
No albergo duda alguna en mi prioridad absoluta, lo primero es la voluntad de los ciudadanos expresada en las urnas de forma clara y libre, porque de ellas emana todo lo demás. Cuando se prohíben las urnas, cuando las leyes prohíben el uso de las urnas, es que la democracia ha muerto. Ninguna Ley esta por encima de la voluntad de los ciudadanos, ninguna Constitución tiene vigencia sin la voluntad de las urnas. Cuando unas leyes, una Constitución prohíbe y juzga el uso de las urnas, es que la ya no es una democracia, es una dictadura en puerta de la tiranía. Por ello, hoy en Catalunya no juzgan a personas, no juzgan a un pueblo, no juzgan a todos, porque juzgan el uso de lo más sagrado de la democracia, el uso libre de las urnas para consultar al pueblo. Hoy en Catalunya juzgan a la democracia.
Este juicio es la muerte de la democracia española. La muerte de la Constitución del 78. Cuando un sistema juzga el uso de las urnas, es que ya no es una democracia, es una dictadura. Por ello no se puede juzgar a los que proponen y usan las urnas, a quienes hay que juzgar es a quienes lo impiden. Hoy los juzgados en Catalunya no son los catalanes, ni el resto de ciudadanos del actual Estado español, hoy a quién se juzga es al sistema antidemocrático español que impide y castiga a los demócratas. Hoy quién se sienta en el banquillo no es Catalunya, es la actual España.
Ha llegado el momento de acabar con el actual sistema político español, de cambiar las leyes por otras más abiertas y democráticas, por otro Estado más plural y moderno. Ha llegado el momento en el que las decisiones se tomen en las urnas y no en los despachos de cuatro políticos o unas leyes desfasadas. Ha llegado el momento de devolver el poder a los ciudadanos, devolver el poder a las urnas hoy secuestradas.
El pueblo exige reformas que el poder actual les niega. Cuando el poder niega la voz a los pueblos, estos están obligados a desobedecer y cambiarlas. Eso es lo que está ocurriendo hoy en Catalunya, que un pueblo que no puede ejercer el derecho básico de la democracia, se subleva mediante la desobediencia y la negación de la validez de las layes que se lo impiden.
Hoy estoy con el pueblo de Catalunya, hoy estoy con el pueblo catalán, porque hoy no se decide su derecho a decidir de forma democrática, hoy se decide mi derecho a decidir. Hoy no se decide su derecho a urnas, hoy de decide mi derecho a las urnas. Hoy no se decide la democracia en Catalunya, hoy se juzga mi democracia. Hoy no se juzga la liberta de los catalanes, hoy se juzga mi libertad… la de todos y todas. Por la democracia, por la libertad, y por el derecho a decidir de los pueblos… Porque hoy nos juzgan a todos y todas… hoy TODOS SOMOS CATALUNYA
Pedro Ignacio Altamirano
6 de febrero 2017