La tensión en la península de Corea ha aumentado a partir de que Corea del Norte lanzara cuatro misiles balísticos, un ensayo que se para un eventual ataque de las bases de Estados Unidos en Asia. Tres de los misiles cayeron a 350 km Japón, de acuerdo a los reportes de prensa desde esa país.
La respuesta de Estados Uunidos no se ha hecho esperar y ha comenzado a emplazar misiles THAAD en Corea del Sur, al tiempo que el presidente Donald Trump ha llamado al presidente surcoreano para expresarle su apoyo.
"Las continuas acciones provocadoras por parte de Corea del Norte, incluido el lanzamiento de múltiples misiles ayer, solo confirman la prudencia de la decisión de nuestra alianza el año pasado para emplazar el THAAD en Corea del Sur", indicó el almirante Harry Harris, jefe del Comando del Pacifico, en un comunicado.
Se informó que al igual que el sistema de misiles Patriot, el objetivo del THAAD es interceptar y destruir misiles balísticos de corto y mediano alcance en la etapa final de su recorrido, indicó el ejército estadounidense en un comunicado.
El THAAD es una batería de 48 misiles en lanzadores móviles que utiliza poderosa tecnología de radar y rayos infrarrojos para interceptar misiles dentro de un rango de 200 km, mientras están en su fase de descenso.
El anuncio de THAAD surgió cuando el servicio de noticias estatal de Corea del Norte, KCNA, dijo que el líder Kim Jong Un supervisó personalmente el lanzamiento de los misiles balísticos de mediano alcance el lunes, tres de los cuales volaron unos 1.000 kilómetros y aterrizaron sólo 300-350 km de la península de Oga En la prefectura de Akita.
KCNA dijo que los lanzamientos de misiles del lunes fueron parte de un simulacro para probar las capacidades de artillería para atacar las bases militares estadounidenses en Japón.
Pyongyang había repetido anteriormente sus amenazas habituales de tomar "medidas de represalia fuertes" después de que Corea del Sur y Estados Unidos iniciaran simulacros militares conjuntos la semana pasada para poner a prueba su disposición defensiva frente a posibles agresiones del Norte.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, habló por teléfono con el presidente en funciones de Corea del Sur, Hwang Kyo-ahn, para reiterar el apoyo estadounidense a su aliado y enfatizó la necesidad de adoptar medidas firmes para hacer frente al continuo incumplimiento de las resoluciones del Consejo de Seguridad.
En 2006, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas prohibió a Corea del Norte desarrollar armas nucleares y misiles balísticos, y desde entonces ha impuesto una serie de sanciones económicas cada vez más severas a Pyongyang por seguir violando estas restricciones.