En la conmemoración del 105 aniversario del nacimiento del fundador de Corea del Norte, Kim Il-sung, las máximas autoridades de esta nación anunciaron este sábado que están “listas para un ataque nuclear”.
Con un impresionante desfile militar han celebrado “El Rey Sol de Corea o Día del Sol”, advirtiendo a Occidente que se defenderán con sus poderosas armas.
Si Donald Trump ordena disparar contra Corea del Norte, de seguro que habrá una respuesta de las estructuras balísticas de Kim Jong-un, el joven líder norcoreano.
Precisamente el régimen de Jong-un ha prometido “responder sin piedad” a una posible agresión estadounidense.
"Nos defenderemos con la poderosa fuerza de las armas", dice Corea del Norte ante el despliegue de portaaviones estadounidenses hacia la zona.
La Semana Santa es una ocasión ideal para reflexionar y fortalecer nuestra espiritualidad, y ojalá los líderes mundiales así lo comprendan.
Oración del Papa
El Papa Francisco ha orado por el mundo exhortando a los líderes del globo a evitar su destrucción.
Las armas nucleares construidas por el hombre no deben ser usadas para destruir el planeta. ¿Qué hacer entonces?
La inteligencia humana nos permite comunicarnos y razonar y eso es precisamente lo que debe primar.
La soberbia y la sinrazón no aportan nada positivo para dirimir conflictos, lo agravan muchas veces irreversiblemente.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, debe reencontrarse con Dios y evitarle al mundo un nuevo holocausto de consecuencias devastadoras.
Nadie en su sano juicio quisiera ver al planeta arder por los cuatro costados y eso deben tenerlos bien en cuenta los asesores de Trump antes de intentar un ataque contra la República Popular de Corea del Norte.
El propio presidente de la República Popular de China, Xi Jinping, instó al gobernante estadounidense a “tener calma” y buscar las vías del diálogo con los norcoreanos.
El líder chino, quien habló con Trump vía telefónica, abogó por una solución pacífica a la crisis y “el mantenimiento de la paz y de la estabilidad “en la península coreana.
Representantes del gobierno de Rusia igualmente han expresado preocupación por las consecuencias que generaría una conflagración armada en la Península de Corea.
De su lado, los dirigentes norcoreanos advierten que están preparados para la guerra en caso de un ataque estadounidense a su territorio, lo cual no debe ser subestimado por occidente.
Solo hay que recordar que se trata de un conflicto con más de 60 años luego de que Estados Unidos y la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) acordaran delimitar el área con la separación norte-sur.
¿Quién podría sobrevivir ante un eventual escenario de confrontación armada entre Estados Unidos y el país más hermético e impredecible del mundo?
Mi memoria recrea los bellos paisajes de la capital de Corea del Norte, Pyongyang; la extrema organización de su tránsito vial, la seguridad interna de su territorio, el amor de sus habitantes a su tierra y el rostro de excelente anfitriones de sus gentes.
El norcoreano es en extremo muy trabajador y decidido a defender metro a metro cada espacio de su territorio en la Península de Corea, desde el Paralelo 38 Norte que los separa de Corea del Sur.
Allí estuvimos junto al colega periodista Luis Cárdenas acompañando al ministro sin cartera, Miguel Mejía, en visita oficial en noviembre del 2008.
Actuar con Cautela
Aquí los estrategas militares y de seguridad de Norteamérica tienen que hilar fino, con sangre fría y no llevarse por las emociones del arsenal bélico que manejan.
Los promotores de la “industria de la muerte”, es decir, las megas estrellas y multimillonarios fabricantes de armas deberán entender que ellos también irán a la tumba si el mundo es despedazado.
La ONU: ¿convencerá a las potencias nucleares?
Probablemente sea el último esfuerzo por salvar al mundo de una hecatombe, en la que ni los multimillonarios del planeta, podrán evitar sucumbir ante el fuego arrasador de una guerra nuclear que sepultaría la especie humana.
Una iniciativa de 120 países destinados a prohibir el uso de armas nucleares parece condenada al fracaso ante un boicot encabezado por la principal potencia nuclear del mundo, Estados Unidos de América.
Al menos 40 naciones entorpecerán la iniciativa a ser debatida próximamente en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York.
Estados Unidos alega que no suscribirá el documento porque está segura de que Corea del Norte e Irán no respetarán la eliminación de las armas nucleares.
Los estadounidenses tienen el respaldo de Inglaterra; Francia, Alemania, España, Portugal, Israel y Corea del Sur entre otros países.
Sólo nos queda implorar a Dios por la paz mundial para que evitemos su total destrucción. ¡Aún podemos evitarlo!
Articulo de Manuel Díaz Aponte
Sábado, 15 de abril del 2017