El presidente Joaquín Balaguer en una de sus folclóricas frases a las que nos tenía acostumbrados dijo para las elecciones del 2000: “No se presta el sombrero dos veces a una misma persona”, en clara alusión al Partido de la Liberación Dominicana, el cual apoyó en el 1996 con el Frente Patriótico para que fueran gobierno, de no hacerlo el partido de Juan Bosch no tenía posibilidad de llegar a la presidencia en esa coyuntura histórica.
Pareciera que el exmandatario Leonel Fernández Reyna no entendió la expresión sabia del Dr. Balaguer, porque le prestó su sombrero del poder a Danilo Medina en dos ocasiones, en el 2000 y también en el 2012, los resultados ya los conocemos, no ha habido forma de que se lo regrese y por lo que se observa en el panorama político se quedará “sin sombrero y sin cabeza”, porque el líder sureño Medina se la va a cortar, a menos que el “León” empiece a hilar fino desde ya…
Danilo Medina viene ejecutando su plan de hundir y desaparecer políticamente a Leonel Fernández desde que se instaló en el solio presidencial, todo lo ha calculado muy bien, primero empezó desmontando el modelo de Leonel en la forma de gobernar y dirigir las cosas públicas, ha hecho y se ha enfocado en todo lo que Fernández no le daba importancia, como por ejemplo la educación primaria y el contacto con la gente de forma directa, que los ciudadanos no tengan que ir al Palacio Presidencial sino que el presidente va donde ellos.
Dentro de las estrategias de Danilo ha estado desarticular a todos los hombres poderosos económica y políticamente de Leonel, como Freddy Pérez, Bautista Rojas Gómez, Franklin Almeyda Rancier, Radhames Jiménez y Luis Manuel Bonetti. Desde que llegó al poder lo primero que hizo fue agarrar por los testículos al secretario de Organización del PLD y senador Félix Bautista con expediente en la justicia asesinándolo moralmente, dejándolo sin movilidad para montar el proyecto de retorno a la presidencia del Dr. Leonel Fernández, luego lo liberó a cambio de apoyarle su reelección del 2016 y no meterse más en contra de él, por eso vemos a Félix mansito…
Y para completar, a Víctor Díaz Rúa que privaba en bravucón, arrogante y prepotente, lo sacó de circulación con el caso de los sobornos y sobrevaluaciones de Odebrecht. Otro tentáculo de poder económico y de lealtad al príncipe Leonel es el empresario Carlos Osoria, al cual el gobierno de Danilo Medina lo tiene sin capacidad de accionar a favor del “encantador de serpientes” porque le debe miles de millones de pesos, no le pagan y lo han asfixiado. Faltaba Diandino Peña para terminar de desarticular y sepultar a Leonel en el aspecto económico, por ende en lo político, en esta semana recién pasada lo destutanó, destituyéndolo en medio de un escándalo de corrupción. Sólo nos queda esperar qué hará Danilo con Margarita Cedeño de Fernández, y si finalmente le cortará la cabeza al León para que no vuelva a la jaula presidencial de la México.