Afirma que sería un “imprudente salto al vacío que pone en riesgo la democracia”
Santo Domingo. El Bloque de Partidos de oposición reiteró hoy que rechaza de manera categórica la permanencia de los actuales miembros del Tribunal Superior Electoral (TSE) en virtud de que han demostrado parcialidad política manifiesta y pública en favor del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y sus aliados en perjuicio de la institucionalidad del sistema de partidos.
En rueda de prensa, celebrada hoy en un hotel de esta capital, Jesús Vásquez, Secretario General del Partido Revolucionario Moderno (PRM) leyó un documento en el cual expresa que: “empecinarse en mantener en sus cargos a los actuales jueces y suplentes del TSE constituye un imprudente salto al vacío que pondría en grave peligro la ya precaria democracia dominicana, no sólo en lo que atañe a la gobernabilidad y los procesos electorales venideros, sino a la vida institucional de los partidos políticos cuyos conflictos la ley le otorga mandato para dirimirlos”.
Afirma el documento que la designación por parte del Consejo Nacional de la Magistratura de jueces y suplentes del TSE que no sea fruto de un amplio consenso nacional de todos los partidos y de la sociedad dominicana sería una provocación inadmisible.
Manifiesta que: “Por su condición de árbitros electorales y de conflictos a lo interno de los partidos, pero sobre todo por la prohibición expresa que establece la Ley 29-11 del TSE, los jueces y sus suplentes no pueden responder a los intereses de partidos políticos a los que pertenecen o que sustentan sus candidaturas”.
“En cuanto la designación de los cuatro jueces faltantes de la Suprema Corte de Justicia resulta imperativa insistir en que la misma se lleve a cabo seleccionando jueces de carrera que reúnan los más altos méritos para ocupar tan importantes funciones en el Poder Judicial y cuya imparcialidad sea la garantía que exige firmemente en las calles el pueblo dominicano para combatir la impunidad y la corrupción”, expresa.
Resalta que, el Presidente de la República y el Partido de la Liberación Dominicana cuentan con una clara mayoría de votos en el Consejo Nacional de la Magistratura y tienen el deber ineludible de ofrecer las garantías mínimas de equidad e imparcialidad requeridas para que puedan celebrarse las elecciones venideras en nuestro país. Volver a designar un Tribunal Superior Electoral en violación de las disposiciones de la ley y parcializado políticamente en favor del gobierno sería un golpe mortal para la frágil democracia dominicana.