El envidioso es un insatisfecho que, con frecuencia, no sabe que lo es.
Por Raydina Lora
La envidia es un fenómeno psicológico muy común que hace sufrir enormemente a muchas personas, tanto a los envidiosos como a sus víctimas. También se puede decir que la envidia es aquel sentimiento o estado mental en el cual existe dolor o desdicha por no poseer uno mismo lo que tiene el otro, sea en bienes, cualidades superiores u otra cosa.
El envidioso es un insatisfecho que, con frecuencia, no sabe que lo es. Por ello siente secretamente mucho rencor contra las personas que poseen algo como la belleza, dinero, éxito, poder, libertad, amor, personalidad, experiencia, y felicidad, que él también desea pero no puede o no quiere desarrollar.
La envidia es, de este modo, la rabia vengadora de quien, en vez de luchar por sus anhelos, prefiere eliminar la competencia. Por eso la envidia es una defensa típica de las personas débiles en cualquier sentido.
Las formas de expresión de la envidia son innumerables entre ellas: críticas, murmuración, rechazo, agresiones, dominio, represión, rivalidad, y sobre todo difamación.
Se recomienda a las personas envidiosas que, aumente su autoestima, deje de compararse, trate de enfocarse en si mismo, deje de hablar y de juzgar a los demás, sea original, se feliz como eres ya que nadie es igual a ti, y tú no eres igual a nadie. Recuerda que la envidia existe solo en aquellas personas que no saben aceptar la felicidad de los demás.