Como viene siendo habitual, una vez clausurado el periodo de recepción de obras, en mis funciones como coordinadora del Concurso Internacional Ángel Ganivet, me dispongo a dar cumplida información a nuestros participantes y seguidores sobre los hechos más relevantes que he podido apreciar este año.
En efecto, la presente edición se ve rodeada de circunstancias que nos llaman poderosamente la atención y nos hacen especialmente felices. Por un lado observamos un cambio en las cuotas de participación que consiste, principalmente, en el aumento de participantes de países de lengua hispana cuya representación en el certamen se podía considerar hasta ahora muy baja o incluso anecdótica: salvadoreños, panameños, costarricenses, puertorriqueños y, especialmente, guatemaltecos, que llegan a quintuplicar su presencia respecto a la última convocatoria de poesía. Como resultado de ello, españoles, mexicanos y argentinos, si bien siguen constituyendo el grueso de los participantes, ya no ostentan una superioridad numérica tan aplastante respecto al resto de países. Digamos que van encontrando una competencia progresivamente más firme entre compañeros de otras nacionalidades. De hecho, colombianos y venezolanos pasan a estar también, ya de forma clara e incontestable, entre los más participativos. Parece que ambos, este año de forma significativamente marcada, han querido alzar su voz y manifestarse. Y esto nos alegra sobremanera. Entre otras cosas porque resulta evidente que ellos también tienen mucho que aportar y estamos deseosos de conocer sus puntos de vista e impresiones.
En definitiva, los datos demuestran que, aunque tímidamente, hemos emprendido el camino hacia una mayor homogeneidad en la participación según países; que nos dirigimos hacia cuotas de participación si no equivalentes, desde luego sí más igualitarias. Naturalmente países tan grandes y tan poblados como México o Argentina, por lógica, habrán de seguir teniendo una participación especialmente alta frente a otros de extensión y población mucho más reducidas. No obstante, hemos podido atisbar ya que también en estos se atesora gran talento, y esperamos que las oportunidades de constatarlo crezcan exponencialmente en el futuro.
Por otro lado, los participantes cuya lengua materna no es el español, antes casos más bien aislados, también han aumentado. Este año comprobamos que son más las nacionalidades implicadas en este fenómeno ‒alemanes, argelinos, bosnios, brasileños, belgas, británicos, canadienses, chinos, eslovacos, filipinos, franceses, griegos, holandeses, italianos, israelíes, marroquíes, polacos, portugueses y rumanos‒. Se trata de extranjeros que a menudo gozan de una altísima competencia lingüística, envidiable incluso para muchos hablantes cuya lengua materna sí es el español. Esto, interpretamos con regocijo, viene a confirmar el creciente peso del español como lengua estudiada en el extranjero. Recordemos que el nuestro, que es el segundo idioma del mundo ‒tras el chino mandarín‒ con más hablantes que lo dominan como lengua materna, el tercero más hablado ‒tras el mandarín y el inglés‒ y también el tercero más usado ‒tras el inglés y francés‒ en la comunicación internacional, se consolida, según los datos del Instituto Cervantes, como la tercera lengua ‒tras el inglés y el francés‒ más estudiada en el mundo. De hecho, recientemente ha sido posible constatar que se ha convertido en la segunda más estudiada en los centros de enseñanza primaria y secundaria de países como Francia, Suecia y Gran Bretaña.
Esta prometedora circunstancia se vincula, al tiempo, a la presencia entre nuestros participantes de escritores nacidos en países de habla hispana que envían sus textos desde lugares tan poco previsibles como China o Eslovaquia, sólo por citar dos, y que no pocas veces trabajan precisamente como profesores de español en esos lugares de acogida. Aunque tampoco faltan los desplazados por motivos de estudio u otras profesiones no asociadas a la docencia.
Hemos podido corroborar, por tanto, que nuestro idioma goza de excelente salud y vigor. Nosotros esperamos que la humilde aportación de este certamen al fomento y promoción de la literatura en lengua hispana contribuya también a que así siga siendo.
Además, la presente edición nos ha regalado otra grata sorpresa: el aumento de los nuevos participantes. Nos satisface constatar un año más la alta participación de viejos amigos del certamen, poetas cuya fidelidad hacia nosotros nos abruma; notamos, no obstante, con no menos satisfacción y especialmente en esta edición, un incremento de los nuevos amigos que parecen habernos descubierto recientemente, a los cuales damos la bienvenida y esperamos volver a ver en adelante.
Entendemos que esta evolución tan positiva en las cifras y distribución de los concursantes ha de ser fruto de una más amplia distribución de las noticias referentes al certamen en ámbitos a los que antes quizá tuviésemos menos acceso. En este sentido, queremos agradecer muy especialmente su respaldo a las embajadas de Honduras, Nicaragua y República Dominicana en España, que por primera vez han tenido oportunidad de colaborar con nosotros. Nuestra inmensa gratitud va también para la Embajada de México, un país que, a lo largo de sus años de respaldo a través de su Embajada en Helsinki, se ha revelado especialmente sensible hacia las iniciativas culturales y cuyas instituciones gubernamentales y públicas parecen dotadas de una envidiable infraestructura y organización: desde la Secretaría de Cultura y la Secretaría de Educación Pública a las diversas Universidades y otros organismos. No menos agradecidos estamos a la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura, cuya labor revierte en beneficio de la educación y la cultura en todos los países iberoamericanos, y al resto de Universidades y Academias que este año respaldan nuestro certamen: Universidad de Helsinki (Finlandia), Universidad de La Plata (Argentina), Universidad de Oviedo (España), Universidad de Guadalajara (México), Universidad Simón I. Patiño (Bolivia), Universidad de Salamanca (España), Academia Hispanoamericana de Buenas Letras y Academia las Buenas Letras de Granada.
Además queremos reconocer públicamente su labor, una vez más, a todos cuantos colaboran en la difusión de nuestras noticias: Ministerios, Universidades, Academias, Ayuntamientos, bibliotecas… Porque el éxito y gran aceptación de este concurso depende en primer lugar de nuestros participantes, que deciden honrarnos con su confianza; pero inmediatamente después, de todos esos generosos colaboradores y simpatizantes que ponen sus espacios a nuestra disposición fielmente año tras año: numerosas revistas literarias, prensa escrita y digital y otros medios relacionados con la cultura. Muy reconocidos estamos también a todos aquellos que a título personal deciden hacerse eco de este evento a través de sus redes sociales, webs o blogs. Si la solidaridad es un atributo esencial del ser humano, creemos que determinante resulta para la supervivencia y el progreso de la cultura.
Como siempre, junto con el fallo, a mediados de noviembre, ofreceremos información detallada sobre los índices de participación por nacionalidades y países de envío. Dos datos que muy a menudo, dada la creciente movilidad de la población, no coinciden.
Y ahora, finalmente, ha llegado el ansiado momento de que los poemas de nuestros concursantes pasen a manos del jurado. Un año más, para poder asegurar a nuestros participantes que disfrutarán de juicios sólidos e imparciales, el mismo estará constituido por prestigiosos profesionales de notoria reputación y acreditada solvencia literaria: investigadores, profesores, académicos y escritores cuyos nombres se harán públicos una vez conozcamos su fallo a mediados de noviembre. Serán ellos, que cuentan con toda nuestra gratitud, confianza y afecto, quienes analizarán cuidadosamente cada uno de los textos a concurso. Precisamente por eso, habida cuenta de la alta participación que este certamen concentra, por primera vez hemos decidido adelantar la fecha de cierre para asegurarnos de que nuestros jurados contarán con el tiempo necesario para valorar los poemas con todo el detenimiento que cada uno merecen.
Por otro lado, en la presente edición, gracias también a ese cambio de fechas, esperamos poder contar con otra estimulante novedad durante la entrega de premios que tendrá lugar el 14 de noviembre. Hasta el momento, en pasadas ediciones, mientras la obra entraba en su fase final o esperaba acabar su secado, conseguimos presentar el retrato del ganador a través de fotografías digitales proyectadas durante la ceremonia de premiación. Este año, sin embargo, aspiramos a poder presentarlo físicamente en el Salón de Actos de la sede de la Representación de la Comisión Europea en Madrid (España), que tiene la generosidad de acoger nuestro evento.
Nunca podremos agradecer suficientemente su esfuerzo y profesionalidad a Alejandro Cabeza, retratista español que pone a nuestra disposición su talento desde hace ya cuatro años. Más aún si cabe en la presente edición, en la que, dada su meticulosidad y alto nivel de exigencia, se verá obligado a trabajar con redoblada intensidad para poder ofrecer esta satisfacción añadida al ganador. No obstante nos consta que su diligencia ha sido extrema también en años pasados, pues hasta ahora, a pesar de las exigencias de secado de un material noble como el óleo, nuestros ganadores siempre han recibido sus respectivos retratos en sus domicilios en muy corto espacio de tiempo.
Entendemos que el retrato que está en juego constituye un premio muy especial, que de hecho nos define como un certamen literario único por cuanto respecta al galardón con el que reconocemos a nuestro ganador. Y sin duda supone una oportunidad irrepetible para nuestros participantes. Hemos de recordar, al respecto, que Alejandro Cabeza ha retratado ya a más de cien escritores consagrados y que muchas de esas obras, así como también sus retratos de insignes investigadores y científicos, han pasado a formar parte de las colecciones de numerosas pinacotecas nacionales y provinciales, españolas y extranjeras. Entre sus cuadros más conocidos se pueden citar, por ejemplo, sus retratos de: Lope de Vega y Federico García Lorca ‒colección del Museo Nacional de Teatro‒, Antonio Machado ‒colección de la Universidad Internacional de Andalucía (Campus Antonio Machado de Baeza)‒, Miguel de Cervantes ‒colección del Museo de Historia de Madrid‒, Ángel Ganivet ‒colección de la Casa-Molino Ángel Ganivet de Granada (Centro Provincial de Documentación)‒, Marcos Ana ‒Museo Luis González Robles (Universidad de Alcalá de Henares)‒, Antonio Carvajal ‒colección de la Academia de las Buenas Letras de Granada‒ o Ana María Matute ‒colección de la Real Academia Española‒.
En adelante entramos en periodo de profunda reflexión. Os emplazamos a consultar la información que iremos facilitando a través de nuestra web https://sites.google.com/site/concursoliterariointernacional y redes sociales @ConcursoLiterarioInternacionalAngelGanivet / @Angel_Ganivet . Os recordamos que podéis contactar con nosotros en todo momento a través de nuestra dirección de correo electrónico [email protected].
Esperamos contar con el privilegio de seguir recibiendo vuestros textos, los verdaderos protagonistas, en futuras convocatorias.
Salomé Guadalupe Ingelmo
Coordinadora del Concurso Literario Internacional Ángel Ganivet