MIAMI, FLORIDA — Los residentes en Miami, al menos lo que se han quedado en esta ciudad, viven en un estado de agustia, aliviada por el informe de que el huarán Irma ha dado un ligero giro hacia el oeste por lo que aquí las cosas no serían peores.
Pero su bajo una tensa situación viven lo que no huyeron de la amenza del infernal huracán, peorestarían muchos de los que huyeron a Tampa, cuando los pronosticos indican que es hacia esa ciudad que iría el ciclón convertido de nuevo en categoría 5.
Para mucho es como si la persecusión fuera en su contra, y eso hace más dramático el paso de este fenómeno para aquellos que lo han dejado todo para protegerse de la esperada embestida.
Se espera que el huracán llegue a los cayos de Florida el domingo en la madrugada fortalecido nuevamente tras salir de Cuba. Sus vientos podrían alcanzar los 257 kilómetros por hora.
Más de seis millones de personas en Florida y Georgia recibieron aviso de que evacuaran sus casas y quienes todavía no la habían hecho trataban desesperadamente de salir en medio de ingentes congestionamientos y escasez de gasolina.
La mayoría hizo caso de las advertencias. Los reporteros de la Voz de América en Miami, Gesell Tobías y José Pernalete, que cubren la llegada de Irma, reportaron los puertos cerrados, calles y autopistas desoladas en Miami Beach, el centro de la ciudad y en lugares como Kendall, al suroeste de la ciudad.
De acuerdo con medios de prensa, en el condado de Miami más de 25 mil viviendas y negocios están sin electricidad, lo que representa el dos por ciento de los 1,24 millones de usuarios en esta zona.
El gobernador de Florida, Rick Scott, aseguró que los efectos del meteoro, con fuertes vientos e intensas lluvias, ya comienzan a sentirse en el sur del estado y pidió a sus residentes que tomen medidas para protegerse de este ciclón 'mortífero'.
Recordó que el nivel del mar pudiera elevarse hasta 3,6 metros en varias zonas de la costa. 'Puede cubrir tu casa', señaló.
Aunque la trayectoria del huracán se ha desplazado ligeramente hacia el oeste, todavía se estima que causará devastación en el litoral oriental mientras golpea el sur de Florida muy temprano el domingo.
Según la entidad, de lunes a martes el huracán debe afectar el centro de Georgia y para el miércoles se prevé afectaciones en los estados de Tennessee, Carolina del Sur y Alabama.