Los independentistas de Cataluña han sumergido a España en un conflicto institucional con la decisión este sábado del gobierno español que encabeza Mariano Rajoy de aplicar el artículo 55 de la Constitución
El Consejo de Ministros de España se ha reunido y acordado proponer al Senado el cese del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, el del vicepresidente, Oriol Junqueras, y el de todos los consejeros del Govern.
De acuerdo a lo acordado, Mariano Rajoy asumirá directamente la competencia de decretar la disolución anticipada del Parlament de Cataluña o el fin de la legislatura así como la convocatoria de elecciones autonómicas.
La convocatoria de comicios debería producirse en un plazo que no exceda los seis meses. Así, de agotarse el mismo, las urnas en Cataluña se abrirían el próximo mes de junio.
A todo lo annciado ha respondido Carles Puigdemont que lo considera un “ataque” y una “humillación”. Anunció que convocará al Parlament de Catalunya para debatir qué pasos dar tras las medidas adoptadas por el Gobierno este sábado, informa La Vanguaria.
Puigdemont hizo su declaración institucional desde el Palau de la Generalitat del sábado por la noche aunque no desveló qué se hará en los próximos días, mientras la intervención de la autonomía no sea efectiva. Sólo pidió la convocatoria del pleno de la cámara catalana, símbolo de la soberanía del pueblo catalán a juicio del Govern, pese a las decisiones judiciales.