El punto medio entre la violencia y la paz sigue siendo el diálogo aunque algunos radicales entiendan que se trata de un”invento” del sistema para impedir las transformaciones sociales.
No obstante, el protocolo es usado a nivel mundial en las estructuras oficiales y se trata de un conjunto de reglas de formalidad que rigen los actos y ceremonias oficiales y diplomáticos.
La bandera y el himno de cada nación se constituyen en el estandarte de su identidad y simbología patria que merecen el respeto y solemnidad de sus ciudadanos al igual que de los extranjeros visitantes.
¿Algún día podrá el ser humano evitar las guerras y el odio esparcido producto muchas veces de la sinrazón e incomprensión? En verdad, aunque parezca difícil, ¿se puede lograr?
Diversas instituciones han jugado un importante rol en la pacificación mundial, específicamente en el terreno de la diplomacia.
Más allá de los resultados tangibles y tras extensas horas de trabajo pretendiendo solucionar conflictos, amenazas y diferencias entre naciones, el servicio exterior se ha convertido en la práctica en una herramienta esencial para delinear las políticas internacionales y la diplomacia entre los Estados en el mundo.
Es más que simplemente una degustación de vinos y finos quesos en hermosos salones tapizados por alfombras rojas.
Imaginémonos lo que sería vivir en la época de la caverna donde el más fuerte se imponía sobre el débil. Aún todavía hay imposiciones, intervenciones y abusos de poder por las potencias hegemónicas que controlan las riquezas en el planeta.
Sin embargo, el surgimiento de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 1945, tras el final de la Segunda Guerra Mundial, marcó un hecho sin precedente en lo concerniente a la búsqueda de la paz y creación de un espacio global de debates entre los países miembros enfocado en un marco de respeto y tolerancia.
Ha sido la plataforma de pacificación universal más significativa e importante del siglo XX, precedida por los intentos de consolidación y posterior fracaso de la Sociedad de Naciones o Liga de Naciones que surgió el 28 de junio de 1919 dentro de las estipulaciones del Tratado de Versalles, suscrito en Paris, Francia.
Esta organización fue creada oficialmente el 10 de enero del 1920 a instancia del presidente estadounidense Thomas Woodrow Wilson, teniendo como sede central a Ginebra, Suiza.
Plataforma de Pacificación
La ONU, cuya sede central está en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, ha jugado un papel trascendental como instrumento de intermediación y escenario deliberativo de asuntos de dimensión mundial.
Este organismo multilateral surgió el 24 de octubre de 1945 en San Francisco, California, y está integrado por 193 Estados miembros y dos Estados observadores. Su secretario general actual es el portugués, António Guterres.
Nadie pone en dudas la preponderancia que ha ejercido el vínculo entre los Estados en la construcción de una sociedad más organizada, pacífica y desarrollista.
Desde la creación del Estado-Nación moderno que hoy conocemos, las decisiones importantes en el mundo han girado en torno a sus instituciones.
Esta visión política se remonta a Europa a finales del siglo XV, como consecuencia de la decadencia de las instituciones medievales, es decir, la nobleza y el clero, base de sustentación del antiguo sistema feudal.
Cuando un Estado acreditante somete ante el Estado receptor la designación de un Embajador se ha partido en principio de un proceso de comunicación institucional por las vías diplomáticas. En este caso, el Ministerio de Relaciones Exteriores es el Órgano Ejecutor de la Política Exterior de una nación.
Entonces se procede a esperar el Beneplácito, procedimiento protocolar por el cual un Estado acepta formalmente la designación de un Embajador previa solicitud hecha por otro Estado vía los trámites diplomáticos correspondientes.
La solicitud de beneplácito, placet o agrément pasa por un proceso de formalidad protocolar y de total confiabilidad donde un gobierno pregunta a otro si la persona elegida para representarlo sería bien acogida en el país receptor.
Cartas Credenciales
Se trata de la ceremonia de Estado en la que el presidente presenta por intermedio del embajador acreditante en solemne acto un documento dirigido al Jefe de Estado receptor. Es una ceremonia vistosa, formal y de total solemnidad.
El tratamiento recibido por ese diplomático es equivalente a un Jefe de Estado en lo concerniente al Protocolo y Ceremonial, iniciándose con la interpretación de los himnos de los países que formalizan sus relaciones; conversaciones en audiencia privada, fotografías y entrega de un documento oficial del nuevo embajador ante el gobernante receptor.
En República Dominicana esa ceremonia se realiza tanto en la escalinata del Palacio Nacional y en el Salón de Embajadores, con la presencia del Jefe de Estado; el ministro de Relaciones Exteriores; el (la) vicepresidente y el director del Protocolo y Ceremonial de la Cancillería.
El artículo 26 de nuestra Constitución establece la normativa del Estado en las relaciones internacionales. Y plantea que “la República Dominicana es un Estado miembro de la comunidad internacional, abierto a la cooperación y apegado a las normas del derecho internacional”.
Asimismo dice que las relaciones internacionales de la República Dominicana se fundamentan y rigen por la afirmación y promoción de sus valores e intereses nacionales, el respeto a los derechos humanos y al derecho internacional.
Relaciones Internacionales
La Carta Magna fija como aspecto esencial el respeto a la soberanía de los pueblos en materia de relaciones internacionales, enfocando que: “En igualdad de condiciones con otros Estados, la República Dominicana acepta un ordenamiento jurídico internacional que garantice el respeto de los derechos fundamentales, la paz, la justicia, y el desarrollo político, social, económico y cultural de las naciones. Se compromete a actuar en el plano internacional, regional y nacional de modo compatible con los intereses nacionales, la convivencia pacífica entre los pueblos y los deberes de solidaridad con todas las naciones”.
En el ámbito diplomático los gestos y los movimientos corporales podrían incidir ante cualquier toma de decisión que implique vincular a un Estado con otro. Por eso, cordialidad, inteligencia y tacto son aspectos esenciales para el éxito de un representante en el servicio exterior.
El artículo 128 de la Constitución dominicana declara que el Presidente de la República es el responsable de la política exterior del Estado, y quien designa a los representantes de las misiones diplomáticas.
“La o el Presidente de la República dirige la política interior y exterior, la administración civil y militar, y es la autoridad suprema de las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y los demás cuerpos de seguridad del Estado”.
Agrega que como de Estado y de Gobierno le corresponde:
-Designar, con la aprobación del Senado de la República, los embajadores acreditados en el exterior y los jefes de misiones permanentes ante organismos internacionales, así como nombrar los demás miembros del cuerpo diplomático, de conformidad con la Ley de Servicio Exterior, aceptarles su renuncia y removerlos;
-Dirigir las negociaciones diplomáticas y recibir a los Jefes de Estado extranjeros y a sus representantes.
La película “El Discurso del Rey” que protagoniza el actor Colin Firht, como El Rey George, galardonada con diversos premios retrata la efectividad de la palabra hablada y escrita que acompañan el accionar de un buen político, embajador o estadista.
Convención de Viena
La diplomacia por mucho tiempo se proyectaba como un secreto de Estado, pero hoy en día es abierta y más transparente llegándose a convertir en un eficaz instrumento ejecutor por excelencia de la política exterior.
La Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas del 18 de abril de 1961 y que entró en vigor el 24 de abril de 1964, representó un apreciable aporte a la eficientización y modernización de las relaciones entre los Estados.
De hecho, permitió delinear con mayor certeza todo lo concerniente al complejo mundo de la diplomacia contemporánea estableciendo en una de sus disposiciones que:”Una convención internacional sobre relaciones, privilegios e inmunidades diplomáticos contribuirá al desarrollo de las relaciones amistosas entre las naciones, prescindiendo de sus diferencias de régimen constitucional y social”.
El artículo dos del texto de la Convención de Viena dice expresamente que el establecimiento de relaciones diplomáticas entre Estados y el envío de misiones diplomáticas permanentes se efectúa por consentimiento mutuo.
Fuentes:
Diplomacia Contemporánea, Manuel Morales Lama
Apuntes de los facilitadores de la Maestría en Diplomacia y Relaciones Internacionales en la UTE, recinto Santo Domingo.
Diplomacia, Henry Kissinger
Diálogo en el infierno entre Maquiavelo y Montesquieue
Constitución de la República Dominicana
Artículo de Manuel Díaz Aponte
Viernes, 8 de noviembre del 2017