Santo Domingo.- La Ministra de la Mujer, Janet Camilo, en compañía de funcionarias y funcionarios de la institución, así también como comunicadoras y comunicadores, personalidades del medio artístico del país que se identifican con la causa, agasajaron a decenas de niños, niñas y adolescentes huérfanos por feminicidios amparados por el programa Progresando con Solidaridad (Prosoli), así como a las familias que los acogen, con motivo de la celebración de los Reyes Magos.
Por segunda ocasión, Janet Camilo, acompañó en un brindis y un almuerzo con los menores, a quienes festejó con juguetes y con la presentación de la película Coco, en una actividad realizada en Teatro Cine Juan Isidro Pérez (Issfapol) , donde los menores vivieron un mundo de fantasía e imaginación.
Camilo, felicitó a las familias acogedoras de niños y jóvenes víctimas por feminicidios, a quienes definió como héroes por suplirlos de amor, atenciones y cariños, además de encargarse de la educación de estos, para que en su futuro sean personas sanas transmisores de cariño y afecto incondicional.
En sus palabras de aliento y esperanza, la titular de la mujer instó a los niños a que persigan sus sueños para que en el mañana sean hombres y mujeres capaces de transformar vidas, de cambiar el mensaje de violencia por paz, que sean la voz cantante de un mejor porvenir para los niños y niñas de la Republica Dominicana.
Felicitó, esta iniciativa social de la vicepresidencia, la cual social protege en la actualidad alrededor de 240 menores de edad que quedaron desamparados tras el asesinato de sus madres a manos de sus parejas o exparejas, mediante el Protocolo de Atención a Niños, Niñas y Adolescentes Huérfanos por Feminicidios, y además brinda seguimiento personalizado a 117 familias acogedoras o extendidas a nivel nacional, para que estos puedan crecer en el seno de una familia que le ayuden a continuar viviendo de manea digna, pese al drama humano que les ha tocado vivir a tan corta edad.
“La paz, armonía, comprensión y la unión, son los valores que deben acompañarlos durante toda su vida, los cuales les permitirán crecer sanos, apegados a las buenas costumbres y a los principios que debe tener un ser humano durante toda su vida para seguir forjando una nación con hombres y mujeres con un futuro brillante lleno de optimismo”, dijo Camilo.
La actividad contó con la participación de Consuelo Despradel, Francina Hungría Chelsy Bautista García, Isaura Taveras,, Georgina Duluc, Aquiles Correa, entre otras figuras públicas, quienes compartieron de manera amena con los niños.
Cabe resaltar, que este programa está dirigido a rescatar y proteger de la pobreza, discriminación, exclusión, abandono, explotación y abuso a los niños que han quedado sin el cuidado de sus padres. Con el protocolo los infantes provenientes de esas familias de escasos recursos en diferentes puntos del país reciben acompañamiento sociofamiliar, socioeducativo, apoyo sicológico y se dota de transferencias monetarias condicionadas a aquellos hogares que, además de enfrentar un feminicidio, han sido categorizados en pobreza extrema o moderada por el Sistema Único de Beneficiarios (Siuben).
Es preciso señalar que, como parte del acompañamiento a estos hogares, tanto los niños/niñas y adolescentes, como las familias acogedoras reciben capacitación especializada en los 42 Centros de Capacitación y Producción Progresando (CCPP) diseminados por todo el país, para que puedan superar las tragedias de las cuales fueron víctimas.
Los hogares categorizados reciben la tarjeta Progresando con Solidaridad, que incluye Comer es Primero, Incentivo a la Asistencia Escolar (ILAE) y el Bono Estudiantil Estudiando Progreso (BEEP), así como el acompañamiento personalizado que contempla el programa.
En coordinación con el Departamento de Salud Emocional de Prosoli, el Ministerio Público, el Consejo Nacional para la Niñez (Conani), y los Ministerios de la Mujer y Salud Pública brinda apoyo tanto a nivel grupal como individual a cada niño con terapia emocional, para trabajar en el proceso de duelo con sus familias acogedoras.
El acompañamiento que se brinda a las víctimas incluye, además de las terapias psicológicas, seguimiento en la asistencia, rendimiento escolar y participación en las Escuelas de Familias, donde se tratan estos traumas y la recomposición familiar.