El Observatorio Nacional para la Protección del Consumidor (ONPECO) reclama de los sectores públicos y privados la búsqueda de una salida responsable al uso de los plásticos como ya han hecho numerosos países del mundo, incluyendo en nuestra región.
El ONPECO entiende que la Industria debería iniciar con una campaña que exprese dónde llevar los desechos de plásticos, si es que de verdad habrá reciclaje del que habla, como inclusión en la economía circular, y no esperar que desde el Gobierno se encabece la iniciativa de educación a la población en ese sentido.
En la mayoría de los países del mundo han asumido iniciativas para la reducción del uso de los plásticos, debido a la amenaza que implican para la vida en el planeta, tras las advertencias de que dentro de 32 años, o sea en el 2050, habría más plásticos que peces en los océanos si no se descontinúa esa práctica indiscriminada que propicia los desechos plásticos en el medio ambiente
La Industria que aplica la norma de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC), no ha esperado que sea el ciudadano que deje de usar el plástico ante las amenazas anunciadas, son ellas mismas las que han asumido su política de cambiar sus procesos productivos y hacerlo amigables con el medio ambiente.
Indica el ONPECO, que con la isla de plástico que se formó en nuestro litoral el martes 10 de julio, tras el paso de la tormenta Beryl, quedó evidenciado que falta mucha educación ciudadana para no verter basura en las calles, mares y ríos, pero la que es biodegradable se integra al ecosistema, en cambio, el plástico queda flotando en las aguas y en otros casos cierra conductos de desagües, por lo que no debemos esperar los resultados de una campaña de educación desde las instancias estatales para tomar medidas, sino tomar la iniciativa como responsabilidad Social corporativa y empresarial. La industria, así como establece mecanismos de distribución para sus productos, debe hacerlo para recoger los desechos que genera y que no son biodegradables.
El ONPECO sugiere a la industria lugares de acopio para que los ciudadanos lleven los plásticos y ellos se encarguen de utilizarlo en la industria del reciclaje. Otra opción es la fabricación de envases de más de un solo uso como ya están haciendo en Bélgica, o el Estado propiciar una Ley que prohíba su uso tal como se hizo en Chile y Colombia.
En España y Canadá las bolsas plásticas tienen un precio, y la gente opta por no comprarlas y lleva sus propios envases a los supermercados.
En la ciudad de Nueva York dejaron de utilizar los platos de fon y en Miami las cadenas de supermercados y farmacias han optado por fundas de papel reusables y reciclables, así dicen en la promoción.
El ONPECO entiende que es responsabilidad del gobierno y de la industria la búsqueda de una salida urgente para no ser los últimos en el mundo en hacerle frente a lo que está ocurriendo con el medio ambiente, y más cuando está en riesgo la vida de todos, incluyendo a quienes habitamos la isla.
El ONPECO cree que tanto el gobierno como la industria deben asumir la norma 26000 de Responsabilidad Social Corporativa y Empresarial, que es la norma con que se protege a los ciudadanos en su relación con el mercado, que son los consumidores.
Santo Domingo,D.N.,
15 de julio de 2018