Los dirigentes perredeistas pertenecientes a la corriente Por El Rescate del PRD, visitaron en el día de hoy la sede del Tribunal Constitucional, donde entregaron una comunicación dirigida al Presidente de ese alto Tribunal Dr. Milton Ray Guevara.
A continuación les presentamos el texto íntegro de la carta firmada por los dirigentes perredeistas Guido Gómez Mazara, Tonty Rutinel Dominguez, Andres Henriquez, Rudy Gonzalez y Francisco Fernández.
15 de agosto de 2018
Santo Domingo, D.N.
Doctor
Milton Ray Guevara
Presidente del Tribunal Constitucional
y Magistrados Titulares.
Su Despacho
Doctor Ray Guevara y Magistrados:
Nosotros, dirigentes políticos de público ejercicio en el Partido Revolucionario Dominicano(PRD) aprovechamos la oportunidad, no para intentar desvirtuar la naturaleza institucional del órgano constitucional sino que, ocupamos su tiempo, para poner en contexto el constante desafío entre los hábitos autoritarios, el uso antojadizo de las organizaciones partidarias y el afán por reproducir una vieja práctica, impropia del siglo 21, caracterizada en seguir provocando que las manías del modelo conchoprimesco prevalezcan en la actualidad.
En manos de ustedes están los recursos incoados contra dos decisiones del Tribunal Superior Electoral (TSE). Las sentencias TSE-004-2018 y TSE-002-2018, ambas establecieron tanto la obligatoriedad de celebrar una convención ordinaria para seleccionar nuevas autoridades como restituir en su condición de militante del partido, al doctor Guido Gómez Mazara. Todos los alegatos jurídicos al respecto han sido depositados por nuestros abogados. Por eso, nuestras líneas se orientan hacia los niveles de preocupación derivados de reiteradas declaraciones públicas de la dirección de nuestra organización, en el sentido de que “esa Alta Corte resolverá en su favor dándole marcha atrás” el contenido de las disposiciones emanadas de la instancia electoral superior, pateando como lo consigna el dispositivo de la sentencia, de que son de cumplimiento inmediato sin importar ningún recurso interpuesto en su contra. Ahí reside el interés de retorcer la esencia de una sentencia que obliga al cumplimiento puro y simple!
Aunque las palabras del magistrado de mayor jerarquía en el Tribunal Constitucional, doctor Milton Ray Guevara, recordaron el protocolo procedimental de los recursos puestos a disposición, inclusive, señalando que casos del año 2016 no han sido fallados todavía por el Tribunal Constitucional, resulta que en el orden práctico, los actuales administradores de las siglas partidarias pretenden no darle curso al carácter de obligatoriedad de la decisión TSE- 002-2018 bajo el falso predicamento que, el recurso incoado por ellos, dilata, retarda y hace impracticable la celebración del torneo interno para seleccionar las nuevas autoridades. Innegablemente, un ardid sin fundamentación jurídica revelador del asalto a la razón legal y amparado en excusas de ciudadanos desprovistos de verdaderos valores democráticos, seducidos por la falsa creencia de que la política puede imponerse sobre el derecho.
Podría aparentar un tema exclusivo de la vida partidaria, en el terreno de los hechos se convierte en un elemento perturbador y materia de especulación para retardos con capacidad de insistir que el Tribunal Constitucional sirva para borrar situaciones claramente sancionadas por la instancia superior electoral y definidas en el estatuto partidario. Además, la reiterada exhibición del abogado que conduce legalmente el proceso y postula a favor de la causa del compañero Miguel Vargas Maldonado, en el sentido de que sus excelentes relaciones conducirían a revertir todo el proceso, claramente definido por las sentencias TSE-004-2018 y 002-2018, constituyen la razón de estas líneas.
La defensa, apego y lucha por los valores democráticos no es ajena al Tribunal Constitucional porque el mismo proceso de creación de esa Alta Corte obedece al interés de hacer avanzar la nación en el marco de sus conquistas institucionales, y lo lamentable, es que debemos mantenernos vigilantes ante la extraviada noción de políticos altamente impugnados en la sociedad que, todavía hoy, creen posible darle marcha atrás a la historia.
Esperamos su comprensión,